El bloqueo a turistas estadounidenses y rusos, una nueva punzada para la economía española

La Unión Europea ha abierto hoy, y de forma parcial, las fronteras con los países exteriores, que han permanecido cerradas desde que el 17 de marzo se acordara cerrar de forma generalizada la entrada de ciudadanos a la UE.

A partir de hoy, son catorce nuevos países considerados “seguros”, cuyos residentes podrán viajar a la Unión Europea. Esta decisión se tomó después de que ayer los países miembros aprobaran esta lista, con la premisa de que se irá revisando cada dos semanas en función de la evolución de la pandemia. Una lista con la que España ha estado de acuerdo, con el objetivo de atraer a nuevos turistas a nuestro país.

En el año 2019, España recibió un total de 83,7 millones de turistas extranjeros, que dejaron más de 92.200 millones de euros en nuestro país. En lo que llevamos de 2020, esta cifra desciende hasta los 11.700 millones de euros según los datos del INE. Una cifra que se ha mantenido congelada durante los últimos tres meses.

El país que más gasto realizó en 2019 fue Reino Unido, con casi 18.000 millones de euros, seguido por Alemania (11.700 millones de euros) y Francia (casi 7.600 millones de euros). Desde los países nórdicos también fueron más de 5,5 millones de turistas los que eligieron nuestro país como destino vacacional.

La mala noticia para España radica en que en dicha lista de países “seguros” no figuran Estados Unidos, Rusia ni la mayoría de países latinoamericanos, estos últimos consideraos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) epicentro mundial de la pandemia, ya que a día de hoy acumula más del 25% de los casos mundiales.

Una enorme pérdida económica

La ausencia de países en esta lista se traduce en una enorme pérdida económica, que a estas alturas de año ya se está haciendo notar en la economía del sector.

Según el INE, los visitantes estadounidenses (que en el año 2019 ascendieron a 3,3 millones de turistas), gastaron de media 1743 euros. De hecho, el año pasado, España experimentó un gran aumento en la llegada de turistas estadounidenses, con un 12,6% más en comparación con los datos registrado el ejercicio anterior. Fue la mayor subida como país de origen de turistas, que dejaron en España casi 5.810 millones de euros.

Con respecto a los países latinoamericanos, Brasil llegó a inyectar un total de 872 millones con un gasto medio de 1.583 euros, que además experimentó un aumento de un 6,9% en cuanto a la llegada de nuevos visitantes extranjeros.

Rusia es otro de los países que más dinero ha dejado. Entre enero y agosto del año pasado llegaron a España más de 900 mil rusos, y el gasto medio fue de 1.480 euros. Esto supuso para nuestro país unos beneficios de más de 2.300 millones de euros.

Una de las sorpresas ha sido el caso de China, cuyos residentes podrían entrar en la Unión Europea en el caso de reciprocidad. Es decir, si Pekín permite la entrada de ciudadanos europeos, la UE podría permitir la entrada de los turistas chinos. Los visitantes orientales dejaron un gasto de más de 1.675 millones de euros en nuestro país y fueron casi 900 mil turistas chinos los que llegaron a España durante 2019. El gasto medio es uno de los más altos en el marco turístico, que se sitúa en 2.563 euros. Una suma que está muy por encima de la de los turistas británicos, alemanes o franceses.

El turismo es uno de los grandes motores económicos en nuestro país y una pieza fundamental, que representa el 12% del PIB. Con la reapertura de las fronteras y la llegada de nuevos turistas a España, el sector del turismo no quiere dar por perdida la temporada de verano y espera recuperar parte de los beneficios que han perdido durante estos tres últimos meses de pandemia.