La Bolsa cierra una semana aciaga, un mal mes y un pésimo semestre

Ha sido un semana muy complicada en los mercados financieros. La Bolsa ha perdido un 5,7 por ciento en las últimas cinco sesiones. El mes de julio ha sido negativo, lo que incrementa la caída acumulada en lo que va de año hasta el 27,98 por ciento. Hoy el índice Ibex 35 ha cerrado en 6.877 puntos, con baja de un 1,7 por ciento. Los analistas técnicos avisan de que tras perder los 7.000 puntos, la Bolsa puede irse a buscar apoyo “grosso modo” a la zona de los 6.600 puntos primero y a los 6.400, después. El deterioro en los mercados de acciones está servido.

Han caído con especial fuerza las empresas relacionadas con el turismo. Sobre todo Meliá Hoteles y también la aerolínea IAG, que ha publicado pérdidas de 3.800 millones de euros a cierre del primer semestre, frente a los beneficios de 800 millones de un año antes. La compañía ampliará capital en 2.750 millones de euros para fortalecer su balance y mejorar su liquidez. Por su parte, Meliá ha publicado sus peores resultados de la historia, con una pérdida de 358 millones entre enero y junio.

Siguen débiles Telefónica y los bancos. Ha caído hoy Caixabank, tras conocerse que su beneficio se ha reducido un 67 por ciento en el primer semestre, hasta 205 millones de euros. Y ha bajado el Banco Sabadell, que ha ganado 145 millones de euros, lo que supone un 72 por ciento menos. Ambos bancos han provisionado más de mil millones de euros para defenderse de posibles efectos añadidos de la pandemia de coronavirus sobre sus cuentas. Hoy ha comenzado el periodo de aceptación de la oferta de los fondos KKR, Cinven y Providence sobre MásMóvil. Terminará el 11 de septiembre. La oferta contempla el pago de 22,50 euros por acción. Hoy la compañía ha cerrado a 22,68.

A todo esto, el congreso estadounidense sigue sin cerrar un acuerdo para impulsar un nuevo plan de estímulo económico por un billón de dólares. Y los inversores se preocupan, sobre todo porque la falta de contención de los contagios por coronavirus en numerosos lugares del planeta dificulta seriamente la recuperación de la actividad económica. Los desplomes de los PIB de Estados Unidos, Alemania y España dejan bien a las claras el impacto de la pandemia sobre la economía y sobre los mercados. Las Bolsas se han dolido, mientras se ha debilitado el dólar y sigue disparada la cotización del oro. El euro ha superado con holgura ya el cambio de 1,18 dólares, mientras el metal amarillo ha puesto proa hacia el precio redondo de 2.000 dólares por onza. A comienzos de año se pagaba a 1.500 dólares.

Los mercados financieros (más los europeos que los de Estados Unidos) están pasando toda una travesía del desierto a la espera de algún soplo de aire fresco que permita recomponer la figura. Esa esperanza está localizada en el ámbito científico. Lo último de lo último es que un medicamento para el colesterol podría reducir la violencia del coronavirus. Según la universidad Hebrea de Israel y el centro médico Mount Sinaí de Nueva York el fármaco fenofibrato inhibe la capacidad de reproducción del virus. Por su parte, la Universidad de Oxford ha ofrecido favorables datos sobre la vacuna que desarrolla junto con Astra Zeneca. Y la biotecnológica estadounidense Moderna ha comenzado ya los ensayos de fase III de su vacuna contra el Covid-19. De momento, los resultados son muy esperanzadores.

También la biotecnológicas Pfizer y Biontech están progresando rápidamente con la suya, aunque hay más de 150 de estudios en marcha. La economía mundial y los mercados financieros dependen en gran medida de los avances que se produzcan en la lucha contra la pandemia. Los inversores temen que la situación se complique sobremanera en todo el mundo cuando el Covid-19 se solape con la gripe estacional sin que haya todavía una vacuna disponible y fiable. La Casa Blanca ha llegado a un acuerdo con Pfizer para la entrega de 200 millones de dosis de su vacuna en cuanto consiga su aprobación. La farmacéutica china de SinoPharm espera tener lista la suya antes de que acabe el año en curso. Si todo va bien, claro. Y Rusia ha asegurado que puede aprobar una vacuna eficaz a lo largo del mes de agosto. A ver si es verdad. De todas formas, la OMS, la Organización Mundial de la Salud, no espera vacunaciones masivas hasta al menos el primer trimestre de 2021.