La Bolsa firma su duodécima sesión bajista consecutiva tras el frenazo de la actividad industrial en Europa
Hoy el índice Ibex 35 ha cerrado en 7.806 puntos, con un recorte del 1,02 por ciento
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Los inversores y los ahorradores lo han tenido y lo tienen complicado. En este año han caído tanto las Bolsas como los precios de los bonos. Y parece que ni las unas ni los otros consiguen encontrar suelo. Así que el dinero ha sufrido, sufre y seguirá haciéndolo. Pesan como una losa la desaceleración de la actividad económica mundial, la creciente inflación y las nuevas subidas de tipos de interés que preparan tanto el Banco Central Europeo como la Reserva Federal de Estados Unidos. La parte buena es que ahorradores los que tengan liquidez pueden beneficiarse de la mayor rentabilidad de los depósitos bancarios y del mayor rendimiento de los activos de deuda pública.
Hoy el Tesoro español ha captado 5.370 millones de euros en la subasta de deuda a medio y largo plazo. Ha colocado títulos con vencimiento a 3, 10 y 30 años. En todos los casos con una rentabilidad muy superior a la subasta precedente. Destaca la subida de la rentabilidad del bono a diez años, que ha pasado del 1,991 por ciento al 2,822. Los títulos a tres años han pasado del 1,43 al 1,81 por ciento. Además, la tesorería pública ha colocado obligaciones a 15 años ligadas a la inflación, cuyo rendimiento a pasado de negativo a positivo.
Así que la Bolsa no levanta cabeza. Ha encadenado ya una docena de sesiones con pérdidas. Es una de las peores rachas que se recuerdan. Hoy el índice Ibex 35 ha cerrado en 7.806 puntos, con un recorte del 1,02 por ciento. Hace quince días superaba los 8.500 puntos. Llueve sobre mojado y la caída acumulada en lo que va de año supera ya el 10 por ciento. Han tenido un día especialmente malo las empresas acereras, los bancos y las compañías relacionadas con el turismo y los viajes. Por el contrario, han subido a contracorriente del mercado algunos valores grandes. Entre ellos Telefónica y las eléctricas.
Los mercados han tenido que digerir un preocupante indicador industrial en la zona euro. El índice PMI que mide la actividad manufacturera ha bajado un par de décimas en agosto, hasta una lectura de 49,6 puntos. Registros por debajo de 50 indican contracción de la actividad, que se nota especialmente en Alemania, Italia y España.
En Estados Unidos se han publicado las peticiones semanales de subsidios por desempleo, un dato que sirve como aperitivo al importante indicador de paro que se conocerá mañana. Ha sido mejor de lo que se esperaba, (232.000 frente a las 250.000 esperadas), lo que habla de un sólido mercado laboral lo que, por tanto, da luz verde a la Reserva para que mantenga sus rápidas e intensas subidas en el precio del dinero. Por el contrario, la productividad en EEUU se ha contraído de manera importante en el segundo trimestre.
En los demás mercados, el oro baja de los 1.700 dólares por onza, cuando rozaba los 2.000 esta pasada primavera. El mercado del oro cotiza las próximas y agresivas subidas en el precio del dinero. Mientras tanto, el precio del petróleo sigue a la baja, presionado por el enfriamiento de la actividad económica en el mundo. El barril de crudo del Mar del Norte, el que se utiliza como referencia en Europa, se paga esta tarde a 931,5 dólares. Muy lejos de los 140 que alcanzó en el mes de marzo, poco después de la invasión rusa de Ucrania. En las divisas, el euro continúa ligeramente por debajo de la paridad con el dólar.