La Bolsa se lame sus heridas y recupera una minúscula parte del terreno que perdió ayer

Este viernes, las Bolsas han recuperado el resuello después del severo correctivo que sufrieron el día anterior. Ha sido, en todo caso, una reacción puramente testimonial. Pero algo es algo. Por lo menos ha detenido la sangría. La Bolsa de Nueva York, que ayer perdió cerca de un 7 por ciento en su índice Dow Jones, recupera esta tarde apenas un 1 por ciento. El mercado neoyorquino se ve lastrado por el aumento en el número de contagios de coronavirus que se ha producido en algunas zonas de Estados Unidos.

El índice Ibex 35 ha cerrado en 7.292 puntos, con una tímida ganancia del 0,20 por ciento. La semana se salda con una pérdida del 7,4 por ciento. En lo que va de año, la Bolsa acumula una pérdida del 23,6 por ciento. Las empresas hoteleras y las relacionadas con el turismo, las acereras y los bancos han restañado parcialmente sus heridas. Pero sólo parcialmente. A pesar de la recuperación de hoy, el Banco Santander ha bajado un 12 por ciento esta semana. El Banco Sabadell ha perdido un 70 por ciento de su valor en lo que va de año. Ya vale menos de 2.000 millones de euros. Hoy se pueden comprar tres acciones del Sabadell por un euro. Pero no hace muchos días se podían comprar cuatro por euro.

Inditex, que ha publicado resultados esta semana, ha bajado un 9 por ciento en las últimas cinco sesiones. Un 7 por ciento se ha dejado esta semana Telefónica. La empresa ha celebrado hoy junta de accionistas. Pagará este año un dividendo 40 céntimos por acción mediante el sistema de "scrip dividend". El accionista decide si quiere cobrarlo en acciones nuevas o en efectivo. La primera mitad se abonará el día 16 de junio y los restantes 20 céntimos en diciembre. El presidente de la compañía, José María Álvarez Pallete, ha asegurado que en el futuro mantendrá un dividendo atractivo y sostenible. En los últimos cuatro años, Telefónica ha reducido su deuda neta en 15.000 millones de euros. Más de un 4 por ciento ha subido hoy Laboratorios Almirall, mientras Mediaset se ha dejado un 3 por ciento. A partir del día 22, el primero sustituirá al segundo en el índice Ibex 35.

El mercado en su conjunto no ha convencido hoy demasiado a los analistas. La cesta de condicionantes negativos pasa por el temor a una recuperación de la economía más lenta de lo que ahora se descuenta, por previsibles caídas de resultados empresariales, por el temor a un rebrote del coronavirus y por las tensiones geopolíticas. Hoy se ha conocido que el PIB de Gran Bretaña se ha contraído un 20,4 por ciento en el mes de abril. Un dato demoledor.

En la zona euro, la producción industrial se ha contraído un 17,1 por ciento en abril. Es un muy mal dato, pero mejor de lo que se esperaba. Desde Estados Unidos, tampoco llegan referencias halagüeñas. Además de las malas previsiones que maneja la Reserva Federal, las cifras de paro son machaconamente preocupantes. La semana pasada, más de un millón y medio de estadounidenses solicitaron un subsidio por desempleo. En los últimos tres meses, la cifra supera ya los 44 millones.

Hay algunos otros nubarrones en el horizonte. La creciente tensión social en Estados Unidos, el vandalismo y los disturbios en numerosas ciudades del país contribuyen a dificultar la recuperación de la economía. Y las manifestaciones multitudinarias podrían contribuir a un aumento de los casos de coronavirus. Sin embargo, algunos analistas consideran que precisamente la creciente tensión social en Estados Unidos, el vandalismo y los disturbios en numerosas ciudades del país pueden contribuir a la resurrección electoral de Trump, sobre todo si logra contener las protestas y contenta así a sus votantes tradicionales.

En el mercado de materias primas, hoy sigue debilitándose el precio del petróleo. El crudo del Mar del Norte se ha depreciado un 10 por ciento en pocos días. Hoy se paga a 38,5 dólares por barril. En el mercado de divisas, el euro pierde fuelle y baja de 1,13 dólares. Hace menos de un mes, cotizaba a 1,08. En el de deuda, la prima de riesgo baja ligeramente, hasta 103 puntos, con el rendimiento del bono a diez años en el 0,59 por ciento. La deuda pública ha alcanzado un nuevo máximo histórico en España: ha llegado a 1,22 billones de euros, lo que supone el 98,9 por ciento del PIB.