Las Bolsas europeas contienen el aliento ante la falta de acuerdo sobre el techo de gasto en EEUU

Los mercados pliegan velas y navegan hoy al pairo después de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el líder republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, cerraran su reunión de ayer sin acuerdo sobre la necesaria ampliación el techo de deuda.

A comienzos de junio la administración estadounidense se quedará si dinero para hacer frente a sus pagos. Ambos siguen tensando la cuerda, pero siguen buscando soluciones. En anteriores ocasiones en que Estados Unidos se encontró en esta situación siempre se alcanzó un acuerdo “in extremis”.

Con esta referencia, la Bolsa abre muy plana. El índice Ibex 35 baja un 0,3 por ciento tras las primeras operaciones del día, hasta 9.280 puntos. Mientras pasan pocas cosas en el mercado doméstico, los inversores se entretienen en mirar a su alrededor. Destaca la fuerte subida que consiguió ayer la Bolsa de Atenas.

Se disparó un 6 por ciento tras la victoria del partido conservador Nueva Democracia en las elecciones del domingo. El mercado griego de valores ha alcanzado su nivel más alto desde 2014.

Paralelamente la rentabilidad de los bonos griegos a diez años cayó con fuerza hasta el 3,87 por ciento, su nivel más bajo de este año. Por su parte, la Bolsa de Tokio se ha movido hoy ligeramente en negativo, pero se mantiene en sus niveles más altos de los últimos 40 años.

El índice Nikkei ha reconquistado los 31.000 puntos, mientras el yen japonés ha perdido terreno frente al dólar, lo que beneficia a las empresas exportadoras del país del Sol Naciente y potencia la llegada de turistas. El dólar se cambia hoy por 138 yenes.

Hoy se conocerán los indicadores de actividad en el sector industrial y en el de servicios, tanto en Europa, como en Estados Unidos. Desde EEUU llegará también la cifra de ventas de casas nuevas.

La evolución del sector inmobiliario es una de las referencias que estudia más de cerca la Reserva Federal para establecer su política monetaria. A este lado del charco, el gobernador del Banco de España y miembro del consejo del Banco Central Europeo, Pablo Hernández de Cos, cree que todavía hacen falta más subidas de tipos de interés para doblegar la inflación hasta el objetivo del 2 por ciento.

Considera que queda algo de camino por recorrer en el endurecimiento monetario. Los analistas esperan mayoritariamente que el BCE suba dos veces más el precio del dinero, para llevarlo hasta el 3,75 por ciento, nivel en el que seguramente se situará el techo. Los expertos no creen que los tipos de interés comiencen a bajar en Europa hasta la segunda mitad del año que viene.

En los demás mercados, el euro sigue débil frente al dólar. Esta mañana se cambia por poco más de 1,08 dólares. Hace pocos días superaba el listón de 1,10 dólares. El oro se bate en retirada.

Cotiza a 1.960 dólares por onza, frente a los más de 2.000 habituales en las últimas sesiones.

El petróleo repunta, pero se mantiene en precios bajos, presionado por las expectativas de nuevas subidas de tipos de interés, tanto en Europa como en Estados Unidos, y por la pérdida de fuerza en la recuperación de China.

El barril de crudo del Mar del Norte, el que se utiliza como referencia en Europa, se paga a 76 dólares. Hace un año estaba por encima de 100.