Los mercados pasan sin hacer ruido sobre la luz verde al nuevo gobierno de coalición

Los inversores han estado hoy muy atentos a posibles reacciones en el mercado de deuda pública. Hoy la prima de riesgo de España ha aumentado muy ligeramente, apenas un 1 por ciento, hasta 68 puntos básicos. Lleva varios días en torno a ese nivel. La rentabilidad de los bonos españoles de referencia a diez años continúa en torno al 0,40 por ciento. El dinero internacional, por tanto y de momento, apenas reacciona a  la llegada del gobierno de coalición PSOE-Podemos. Y eso que algunas medidas económicas que propone el nuevo ejecutivo provocan cierto nerviosismo, cierta urticaria en los mercados. Algunas pueden ralentizar el crecimiento económico y la creación de empleo, y otras pueden generar más deuda y un aumento  del déficit público. 

No gusta la derogación de la reforma laboral, ni las subidas de impuestos a las empresas y a las rentas más altas,  ni el incremento por decreto de las pensiones o el salario mínimo. Tampoco gustan las tasas a las transacciones financieras. En momentos como éstos de  menor crecimiento económico, algunas de estas medidas parecen conducir hacia un mayor desequilibrio fiscal, además de que pueden reducir los beneficios empresariales y pueden desalentar la inversión extranjera. 

La verdadera piedra de toque llegará el  jueves. Pasado mañana el Tesoro volverá a los mercados en busca de financiación. Realizará la primera subasta de deuda del año. Colocará bonos y obligaciones. Títulos a medio y largo plazo, concretamente a 5, 10 y 15 años. En esa subasta se notará si efectivamente disminuye o no el apetito de los inversores extranjeros por la deuda española.

Por lo demás, han comenzado a tranquilizarse tanto las Bolsas como el mercado de materias primas después de unos días que han sido muy convulsos por esa escalada de tensión entre Estados Unidos e Irán. El índice Ibex 35 ha bajado apenas un 0,22 por ciento, hasta 9.579 puntos.  Parece que se suaviza el temor a que se estrangule la producción de crudo en el Golfo Pérsico. La cuerda puede romperse en cualquier momento, pero de momento no aumenta más la tensión bélica. Y el petróleo baja. Ayer llegó a tocar los 70 dólares por barril. Su precio más alto desde la pasada primavera.  Esta tarde se paga a 68 dólares.

Hoy se ha publicado el IPC adelantado de la zona euro. Se esperaba un repunte de la inflación y así ha sido. La tasa interanual se ha ido al 1,3 por ciento, frente al 1 por ciento anterior. El Banco Central Europeo sitúa su objetivo deseable de inflación ligeramente por debajo del 2 por ciento. En España, según la oficina estadística comunitaria, Eurostat, la tasa de inflación anual ha aumentado tres décimas, hasta el 0,8 por ciento.  Los datos definitivos se conocerán el 17 de enero.

Además, han crecido las ventas al por menor en la eurozona. En noviembre han repuntado un 1 por ciento, con una tasa interanual del 2,2 por ciento, muy por encima del 1,7 por ciento de la lectura precedente. También se ha conocido que el índice PMI del sector de construcción en Alemania ha aumentado en diciembre desde 52,5 hasta 53,8 puntos, lo que ha hecho brotar una sonrisa entre los inversores. Ayer se publicaron los indicadores de actividad en el sector servicios en España y en el resto de Europa. Las cifras han sido en general mejores de lo que se esperaba. También han mejorado los índices compuestos, que miden tanto la actividad en el sector servicios como en el manufacturero. En Alemania este indicador ha superado los 50 puntos y ha salido de la zona de contracción. Son buenas noticias que han hecho respirar con mayor tranquilidad a los mercados.