Los mercados se atrincheran a la espera de la decisión de Westminster sobre los acuerdos del Brexit

Calma tensa a la espera de lo que suceda mañana en el Parlamento británico en la votación sobre los acuerdos para el Brexit entre Reino Unido y la Unión Europea. La libra esterlina ha ido animándose a lo largo del día. Se cambia esta tarde por 1,2880 dólares. Ayer llegó a superar con holgura el listón de 1,29. Sigue fuerte el euro, que se mantiene por encima de 1,11 dólares. Por su parte, el dólar ha cerrado su peor semana de los últimos cuatro meses. 

Ahora los mercados esperan con el alma en vilo la votación que se celebrará mañana en el Parlamento de Londres. El partido unionista de Irlanda del Norte ha insistido hoy en que se opondrá al acuerdo que han alcanzado Londres y Bruselas. Cada vez parecen más escasas las probabilidades de que el Parlamento de Westminster apruebe el acuerdo.  Pero nadie pierde la esperanza. Hasta el rabo todo es toro.

Hoy los mercados han asimilado sin grandes problemas los datos económicos que se han publicado en China. El PIB del gigante amarillo creció a un ritmo del 6 por ciento en el tercer trimestre del año, lo que supone un descenso de dos décimas frente al trimestre anterior. Es, de hecho, el peor registro que se recuerda desde hace cerca de 30 años.  La guerra arancelaria y la desaceleración económica global han pasado su factura.  En Estados Unidos el “leading indicators” o índice compuesto que supuestamente predice la tendencia futura de la economía se ha contraído una décima, cuando se esperaba un dato plano. La Reserva Federal tiene prevista una importante reunión de su comité de mercado abierto para el 31 de octubre. No se descarta que vuelva a rebajar el precio del dinero.

Con estas referencias, el índice Ibex 35 tras algunos altibajos ha retrocedido en el día un 0,11 por ciento, hasta 9.329 puntos. En vencimiento de opciones y futuros apenas se ha dejado notar en los mercados.  En el conjunto de la semana la Bolsa muestra una ganancia del 0,6 por ciento. En lo que va de año acumula una revalorización superior al 9 por ciento. Han bajado con fuerza Cie Automotive y Gestamp, que pueden verse afectados por la previsiones de peores resultados que ha anunciado hoy Renault. El gigante francés del automóvil espera un descenso de su facturación y de su beneficio. Las acciones de Renault han caído hoy un 12 por ciento en la Bolsa de París. Han subido hoy Arcelor y Acerinox, a pesar que pueden verse lastrados por la desaceleración de la economía china.

Han subido los bancos, en especial el Sabadell, que se afianza por encima del euro por acción. El viernes próximo, día 25, la entidad  publicará sus resultados del tercer trimestre del año. Los expertos esperan un beneficio neto de unos 220 millones de euros, frente a los 127 millones contabilizados en el mismo periodo del pasado ejercicio. En los demás mercados, el barril de petróleo repunta, roza los 60 dólares por barril.  Los inventarios de petróleo de la AIE se han disparado en 9,3 millones de barriles en la última semana.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo de España se reduce a 62 puntos, con el rendimiento del bono a diez años en el 0,24 por ciento, sin que haya influido -de momento- el aumento de la tensión en Cataluña.  El “bund” alemán tiene una rentabilidad negativa del menos 0,38 por ciento. Y una curiosidad, la prima de riesgo de Portugal se sitúa en 57 puntos, es decir ya claramente por debajo de la española.

Por lo demás, a media noche de hoy han entrado en vigor los aranceles de Estados Unidos sobre productos europeos por 7.500 millones de euros. Afectarán, entre otros productos, al aceite y el vino españoles. Los mercados, pese a todo, consideran que su impacto sobre el PIB español en su conjunto no será demasiado grave. Apenas un 0,01 por ciento. Falta por ver cómo responde Bruselas y si impone aranceles a productos de Estados Unidos. Y falta por saber si eso provoca una escalada de tensión, un intercambio de golpes al estilo del que ha tenido lugar entre EEUU y China. Nadie olvida que el presidente Trump ha amenzado con imponer también nuevos araceles al sector automovilístico europeo.