Puestos vacantes en hostelería y construcción con un paro efectivo de 3,8 millones

Con el fin de las retricciones ha llegado el impulso económico. Es cierto que el crecimiento en el segundo trimestre fue menor de lo previsto. El INE se veía obligado a rebajar la cifra en casi 2 puntos, del 2,8% de dato adelantado el 30 de julio al 1,1% de la semana pasada. Esa corrección obligará a rebajar las previsiones de crecimiento para este año en al menos un 1 punto, hasta el 5,4% frente al histórico desplome del PIB del 11% en 2020.

Por tanto, la recuperación está en marcha y eso se nota en las expectativas de las empresas. Un estudio de la agencia de empleo Manpower concluye que el 54% de los directivos espera ampliar plantilla de aquí a final de año, eso se traduciría en un crecimiento neto del empleo en un 31%. Sectores especialmente afectados por la pandemia como la hostelería y la construcción lideran ese optimismo con una previsión de generación de empleo neto del 58% y del 50% respectivamente. Por áreas geográficas esas mayores expectativas de contratación se concentran en el centro (Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León).

La construcción necesita 700.000 trabajadores cualificados

Con 3,8 millones de paro efectivo a cierre de agosto, veremos cómo quedan las cifras de septiembre que conoceremos el lunes 4 de octubre, es paradójico que hosteleros y constructores estén teniendo problemas para cubrir vacantes. José María Rubiales es hostelero en Murcia y nos cuenta "el trabajador se ha visto muy inseguro y ha buscado otros sectores económicos" y continúa "nosotros estamos demandado una formación más completa para poder ser más atractivos al personal más cualificado". En la misma línea, Emilio Gallego de Hosteltur recalca que las constantes restricciones han hecho que muchos trabajadores se hayan ido a sectores más estables, lo que ha sido especialmente significativo en lugares de temporada, destinos muy turísticos. "Todos los oficios estamos teniendo problemas para encontrar personal cualificado. Hay un abandono generalizado de la formación profesional. Todo sigue estando muy enfocado a la universidad".

Algo similar se vive en la construcción donde se van a necesitar hasta 700,000 trabajadores de aquí al próximo año por el impulso de la obra pública y de las reformas gracias a la llegada de los fondos europeos. Pedro Fernández, presidente de la Confederación Nacional de la Construcción no cree que el problema sean los salarios, de hecho, el salario medio es un 30% superior al salari mínimo, e insiste en que "hay que abandonar esa expresión despectiva del sector del ladrillo porque la construcción no es ladrillo y carretilla, que también, construcción es modernidad, sostenibilidad, maquinaria, nuevos materiales y nuevas formas de construir". Desde la CNC destacan que además de los perfiles clásicos (peón, jefe de obra, encofrador o albañil) también tenemos nuevos oficios como instaladores de placas fotovoltaicas y parques eólicos, de la realidad virtual o herramientas informáticas de la construcción que además están muy bien remunerados, apuntan.