Va a trabajar de niñera a Finlandia con una familia y lo que se encuentra en la casa la obliga a investigar: "Tenían..."

En la mayoría de los casos, trabajar en otro país ayuda a crecer en lo personal. No es sencillo adaptarse a un entorno distinto, pero sin duda aventurarse a intentarlo y salir de un entorno seguro, puede contribuir a nuestro crecimiento personal y a ver las cosas desde otra perspectiva. Además, el hecho de descubrir costumbres, tradiciones y formas de vida nuevas enriquece nuestra manera de ver el mundo. 

Pero también, dependiendo del país elegido puede permitirnos optar a mejores condiciones laborales y económicas, al margen de permitirnos mejorar idiomas y potenciar habilidades sociales que siempre es un plus a la hora de acceder a un mercado laboral cada vez más competitivo.

Según el Instituto Nacional de Estadística, el número de personas con nacionalidad española que reside en el extranjero alcanzó los 2.908.649 en enero de 2024, lo que supone un incremento de 118.332 personas durante el año pasado. Argentina, Francia o Estados Unidos, se encuentran entre los destinos más demandados. 

no muchos salen al extranjero

No obstante, pese a que se trata de una experiencia muy valorada por las empresas, que siempre puede abrirnos algunas puertas laborales, incluso mejorar las condiciones de un posible trabajo, solo una minoría de jóvenes de entre 25 y 29 años opta por salir a trabajar al extranjero para después retornar, según datos facilitados por el INE sobre 2021, último año disponible.

En concreto salieron de España 19.622 jóvenes con formación superior, una cifra que representa el 0,77 % del total de ciudadanos de entre 25 y 29 años (2,5 millones).

Entre las razones que frenan la salida al extranjero, Valentín Bote, director de Randstad Research, apunta al conocimiento de idiomas.

una española en finlandia

Entre los españoles que sí han salido a trabajar fuera se encuentra Anna Matea, @anna.matea en TikTok. Lleva ya 12 años en Finlandia, pero en una de sus publicaciones recientes ha querido compartir su primer trabajo en el país con una familia como au pair. 

De entonces ha recordado una anécdota curiosa que tiene que ver con la mentalidad de los finlandeses, aficionados a las compras en portales de segunda mano, un mercado que como ella misma señala, "tiene muchísima fuerza". 

En este sentido, un informe del portal de estadísticas, Statista del año 2023,  situaba a Finlandia en tercer lugar -tras Reino Unido y Estados Unidos- en porcentaje de compradores de artículos de segunda mano (entre algunos países seleccionados del mundo).

Lo que a Anna Matea le sorprendió durante el año que trabajó con la familia finlandesa tenía que ver con una pegatina que no quitaban de los vasos de uso diario. "Visité un montón de casas de sus amigos y familiares y tenían también los vasos con la pegatina. Yo esto de verdad que no lo entendía. Ya cuando los vasos ya estaban muy utilizados y los habías metido muchas veces en el lavavajillas, la pegatina como que se empezaba a despegar. Tenía que darle la vuelta porque si no me lo anotaba en el labio y me daba cosa", relata.

La pegatina en cuestión es la propia marca de los vasos, Littala, diseñados Aino Alto, esposa del arquitecto Alvar Aalto, que cuenta con toda una línea de vasos, platos,  copas, etc.

sube el precio en la reventa

Pues bien, la curiosidad  llevó a Matea a investigar, con lo que pudo llegar a la conclusión de que mantener la pegatina sube el precio de los objetos "a hora de la reventa" en portales de segunda mano. 

Por eso, tras mirar en uno de los portales dedicados a tal fin, pudo comprobar que por  "seis vasos con pegatina y caja" pedían 50 euros,  mientras que por seis pero sin esta identificación, y en un "modelo más grande", solo pedían 15.

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