Una buena EPA, con matices, y amenazada por una inflación que rompe todas las expectativas

Buen comportamiento del mercado laboral durante el verano. Era lo esperado por el avance de la vacunación y la relajación de restricciones. Eso ha impulsado la creación de empleo, sobre todo en el sector servicios. De julio a septiembre se sumaron 359,300 ocupados, dejando la cifra total de afiliados en los 20,031,000, el mayor nivel desde el 2008 superando números del tercer trimestre de 2019, antes de la pandemia. Fue el sector Servicios el que encabezó ese aumento de la ocupación seguido de la Industria, siendo la Agricultura y la Construcción las que concentraron la destrucción de puestos de trabajo. Por comunidades, todas experimentaron creación de empleo de julio a septiembre salvo Andalucía, La Rioja, Ceuta y Melilla.

Baja el paro pero sigue por encima de niveles pre crisis

Subió la ocupación y bajó el paro, en 127,100 personas dejando la cifra total en los 3,416,700, lo que supone 200.000 desempleados más que en el tercer trimestre de 2019. La tasa de desempleo queda en el 14,57% aún por encima de los números pre pandemia. Por sectores, vemos que fue el de los Servicios el que más parados sumó seguido de la Agricultura y la Construcción y se redujo en la Industria. Por comunidades, Cataluña, Islas Baleares y Castilla y León lideraron las bajadas del paro frente Andalucía que es donde subió.

1,3 millones de trabajadores entre inactivos o suspendidos

A pesar de los buenos datos de esta última EPA hay que tener en cuenta que sigue habiendo 400,000 trabajadores con el empleo suspendido, entre Ertes y autónomos en cese de actividad, estas personas figuran como ocupados. Y a esto hay que sumar los 902,400 inactivos, personas que no han podido buscar empleo a pesar de estar disponibles para trabajar pero que no contabilizan como parados y siguen siendo 137,400 más que en el mismo periodo de 2019. Tampoco hay que olvidar el 1,122,100 hogares que tienen a todos sus miembros en paro, 1 de cada 4 unipersonales.

Un IPC imparable que amenaza la recuperación

La buena marcha del mercado laboral coincide con un incremento de precios que está superando todas las expectivas. El IPC de octubre se ha colocado en el 5,5% con respecto a hace un año, según el dato adelantado por el Instituto Nacional de Estadística, la cifra más alta desde hace 30 años. Los precios acumulan 9 meses de subidas empujados por el encaramiento de la luz, el gas, los combustibles y los problemas de suministros, una tormenta perfecta que está llevando a organismos como el Banco de España o la AIREF a rebajar sus previsiones de crecimiento por el lastre que pueden suponer para la recuperación este incremento de precios y dentro de ella, para el empleo, porque un aumento de costes de producción puede traducirse en una menor creación de empleo. De momento la tendencia al alza de los precios se mantendrá hasta la primavera del próximo año.