Los partidos independentistas cierran la campaña entre referencias al “sheriff Sánchez”

El vicepresidente del Govern y coordinador nacional de ERC, Pere Aragonès, ha pedido este viernes el apoyo para Esquerra para conseguir que "Cataluña sea la tumba política de Ciudadanos (Cs) y también del PSOE y del resto de partidos de la derecha".

En el acto de final de campaña de ERC celebrado en el Auditorio Municipal de Terrassa (Barcelona), el cabeza de lista de este partido para el 10N, Gabriel Rufián ha pedido el voto para Esquerra para lograr "una derrota incontestable del PSOE en Cataluña".

Rufián ha vuelto a acusar a Sánchez de ser un político "sin principios" porque "es capaz de estar un día alzando el puño cantando la Internacional o hablando de Estado plurinacional, y un tiempo después estar implorando no una, sino cinco o seis veces, los votos de la derecha" en el Congreso de los Diputados.

Ha alertado de que si Sánchez pacta la gran coalición con PP o Cs, o bien acepta la abstención de estos grupos en su investidura, "la regresión de derechos políticos y sociales será absoluta, porque en política no hay nada gratis".

Ha hecho, en este sentido, un llamamiento "a todos los demócratas, republicanos, y a la buena gente que considera que el conflicto político que vive Cataluña con el Estado español se soluciona por la vía política", que tenga presente a la hora de votar el domingo "que solo hay un camino, que pasa por la derrota incontestable del PSOE en Cataluña y por la victoria de ERC".

Por su parte, el expresidente catalán Carles Puigdemont ha pedido el voto para JxCat porque no van "sobrados" y necesitan obtener un grupo propio en el Congreso, desde el que quieren "plantar cara" al jefe del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, al que ha reprochado que actúe como un "sheriff".

Tras dos días ausente de la campaña electoral por el fallecimiento de su padre, Puigdemont ha reaparecido a través de videoconferencia en el mitin final de JxCat en las Cotxeres de Sants de Barcelona, en el que también han hablado la cabeza de lista al Congreso, Laura Borràs, el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y el expresident Artur Mas.

A tenor de las encuestas y los resultados del pasado 28 de abril, Puigdemont ha remarcado que JxCat necesita "un empujón" para lograr los votos necesarios que le permitan obtener esta vez un grupo propio en el Congreso, una vez ERC y CUP han rechazado la propuesta de crear uno unitario.

Un grupo desde el que JxCat, ha afirmado Puigdemont, quiere "plantar cara y parar los pies" a Pedro Sánchez, del que ha dicho que actúa "como una especie de sheriff, un justiciero" que va "diciendo que hará lo que tendría que hacer la justicia".

Además, la CUP ha animado este viernes a los catalanes a llenar las plazas y seguir las instrucciones que dé la plataforma Tsunami Democràtic este sábado día 9, jornada de reflexión.

En el acto final de campaña celebrado en Sabadell (Barcelona), la cabeza de lista por Barcelona el 10N, Mireia Vehí, ha afirmado: "Nuestra política se hace en la calle y no dejaremos de hacerla".

La número tres por Barcelona, Eulàlia Reguant, ha instado a la sociedad catalana a "reflexionar juntos" el sábado y a "ocupar plazas y calles".