La Roca del Vallés opina sobre su vecino más famoso, Salvador Illa: “Como persona, buenísimo; como político…”

La Roca del Vallés es un municipio pequeño, de apenas 10.000 habitantes. “Hasta el año 95, estas carreteras que veis, eran caminos de tierra”, exclama Francisco García, secretario del PSC en La Roca. Desde entonces han cambiado muchas cosas, un polideportivo, piscinas y hasta campo de fútbol. Hablamos con los vecinos y todos apuntan al mismo nombre: Salvador Illa.

El exministro de Sanidad, hoy candidato del PSC a presidir la Generalitat, fue alcalde del pueblo que le vio nacer durante al menos diez años. Tras la repentina muerte de su ‘padre político’ -hablamos de Romà Planas-, Illa aceptó el encargo de dirigir el ayuntamiento del pueblo.

Un traumático mandato que forjó su carácter negociador

García lo tiene claro. La política municipal en La Roca ha sido muy convulsa. Hoy gobiernan los nacionalistas de Junts y ERC en coalición, pero durante los años de Illa como alcalde, tuvo que hacer frente a una moción de censura y hasta una propuesta de suspensión de sueldo. Francisco recuerda los plenos de aquellos años como muy broncos y tiene claro que el carácter de Illa, en buena medida, se forjó durante las luchas municipales.

Es día de mercado en La Roca. Los pocos vecinos que salen a pasear o a comprar se muestran un poco reacios a hablar. Todos conocen a Illa “desde que era así”, afirma uno de los habitantes de más edad mientras baja su mano casi al nivel del suelo. Conocemos a vecinos suyos, que viven puerta con puerta. Todos coinciden en que “es buena persona”.

Aun así, no falta quien siempre añade, “como políticos, eso ya es otra cosa…” No todos son votantes del PSC en La Roca y, aunque se aprecia el valor humano de Illa y su familia (sus padres son auténticamente reverenciados), existen las discrepancias políticas

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Un compañero de Salvador Illa nos desvela su lado más personal

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La Roca Village y el RCD Espanyol

Uno de los proyectos estrella que consiguió atraer Illa al municipio es el centro de compras y outlet conocido como La Roca Village, que abrió en 1998. Igual que la madrileña Las Rozas Village, propiedad de la misma empresa e inaugurada dos años después, esta mini ciudad donde todos los locales tienen un propósito comercial es una de las atracciones turísticas más visitadas de Cataluña junto a la Sagrada Familia de Barcelona.

El proyecto se iba a desarrollar en Mataró, pero gracias a la intercesión de Illa, la empresa decidió finalmente establecerse en el pueblo. Hasta el momento, La Roca era tan solo conocida “por tener la cárcel de Quatre Camins”, nos cuenta García.

Le preguntamos a su compañero de partido por las elecciones, por cómo ve el reto al que se enfrenta Illa, al que conoce desde la adolescencia. Le ve listo, cree que puede afrontarlo y sueña con poder tener una victoria holgada que permita una presidencia socialista.

Para terminar, Francisco nos hace una confesión: “Es muy del Espanyol, muy futbolero”, a lo que le comentamos: “Ya tiene algo en común con Rufián”, sonríe, no ve tan claro que, como en el fútbol, puedan llegar a un acuerdo político.