Así valoran los periódicos el adiós de Rajoy a la política

Para ABC, "ha evitado con buen criterio cualquier imposición a dedo". El País, mientras, lo ve como una "importante rémora para este país reaccionando tarde al desafío independentista catalán o absteniéndose de hacer política a escala europea"

Así valoran los periódicos el adiós de Rajoy a la política

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Las principales cabeceras de la prensa escrita han dedicado su principal editorial de este miércoles a la decisión de Rajoy de abandonar la presidencia del PP después de perder también el Gobierno con la moción de censura de Pedro Sánchez. Para ABC, el líder gallego puso ayer fin a "una densa y productiva carrera". "Es innegable reconocerle la valentía con la que afrontó la recuperación de una España en quiebra técnica tras el mandato de Zapatero, evitando un rescate de la UE que parecía inminente", señala el diario de Vocento. Pese a todo, también le culpa de haber incurrido "en una notable falta de reflejos frente a los unánimes ataques de la oposición contra la corrupción institucional protagonizada por pesos pesados del partido". Para ABC, Rajoy "ha sido generoso al no encastillarse en el PP (...) y ha evitado con buen criterio cualquier imposición a dedo (...) Pero asar el testigo era ya una obligación moral de que siempre ha sido un leal servidor del Estado".

El editorial de 'El Mundo' es muy clarividente: "Y Rajoy supo hacerse a un lado". En él, asegura que el expresidente "ha comprendido -al precio de una traumática experiencia- que, si no se apartaba, su propio ocaso político arrastraría al partido, impidiéndole liderar la oposición con renovada credibilidad". Para el diario de Unidad Editorial, la nueva estrategia del partido es evidente: "reagrupar al centro-derecha en torno al PP, arrinconando a Cs y presentándose como única alternativa posible a Sánchez. Si algo le duele a Rajoy es legar un PP más débil del que recibió, menguado por la fragmentación del electorado y la competencia de un partido joven". Las últimas líneas del editorial son muy amables para Rajoy: "Desaparece una personalidad política cuya influencia en el devenir de nuestra democracia resulta difícil de exagerar. Lo fue todo, y sobrevivió a encrucijadas que parecían insalvables. Ningún otro presidente afrontó crisis sucesivas tan hondas -económica, política, institucional, territorial- y de casi todas logró salir airoso aferrado a un estilo de mando tan elástico como resistente. (...) Rajoy ya figura en la historia de España, y no es descabellado aventurar que las luces de su ejecutoria brillarán sobre sus sombras. Sobre todo por comparación".

El País cree que la salida de Rajoy abre la puerta a un "nuevo PP". El periódico de Prisa dedica palabras menos amables al aún líder del partido: "Tras los vertiginosos acontecimientos de los últimos días, que se han saldado con el nombramiento de un nuevo presidente del Gobierno, la única salida airosa de Mariano Rajoy era la de marcharse y facilitar el relevo. Zanja así, al menos en parte, la indignidad que habría supuesto mantenerse al frente de un partido embarrado por la corrupción y presidido por un líder cuya palabra ha cuestionado un tribunal de justicia. Su inveterado tancredismo le ofreció importantes e inesperados réditos: desde mantener el liderazgo y ganar dos veces las elecciones hasta aplazar las responsabilidades políticas de la corrupción. También ha supuesto una importante rémora para este país reaccionando tarde al desafío independentista catalán o absteniéndose de hacer política a escala europea (...) Marcharse sin dejar atada su sucesión y prometiendo neutralidad en el proceso es un tributo importante al Partido Popular por parte de quien, personal y humanamente, merece reconocimiento". Por último, El País dice que Rajoy  ha gobernado "con más honestidad que acierto" y que en las últimas horas "se ha comportado con la dignidad que se espera de un líder político respetuoso con la ley, la democracia y sus usos"

"La Vanguardia" subraya el "hecho innegable" de que su gestión "contribuyó a capear tal crisis y en buena medida a superarla"La Razón va en esa línea: "Su herencia no se medirá por su capacidad de liderazgo, comunicación, telegenia, ni otras virtudes de los «hiperliderazgos» actuales, sino por la solidez de su programa, seriedad y cumplimiento. Ahí están los datos objetivos y cuantificables: deja una España mucho más próspera que la que recibió 2011 en un momento agónico" 

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