El Cardenal Arzobispo de Barcelona llama a la concordia en la Diada
Juan José Omella, hace un llamamiento a "la concordia", a "construir puentes" y a "fomentar la convivencia" en Cataluña
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El cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, hace un llamamiento a "la concordia", a "construir puentes" y a "fomentar la convivencia" en Cataluña con motivo de la celebración de la Diada el 11 de septiembre.
En su carta dominical de este domingo, titulada "Ante la Diada de este año", Omella, que intentó mediar entre los gobiernos español y catalán antes de la declaración unilateral de independencia de octubre de 2017, recuerda que la Iglesia defiende una solución dialogada a la crisis política catalana.
El cardenal ha pedido aplicar en Cataluña el espíritu de San Francisco de Asís quien defendía que "que allá donde hay odio, yo ponga el amor. Que allá donde hay ofensa, yo ponga el perdón. Que allá donde hay discordia, yo ponga la unión. Que allá donde hay error, yo ponga la verdad".
"Este 11 de septiembre puede ser un buen día para hacer presente el espíritu franciscano, tan arraigado en la cultura catalana. En las actuales circunstancias es posible que alguien piense que esto es una utopía. Pero hay utopías que, con la buena voluntad de todos y con creatividad, acaban convirtiéndose en realidad", propone el arzobispo.
Omella recuerda que los obispos de todas las diócesis catalanas ya hicieron un llamamiento el pasado mes de febrero "a esforzarnos en rehacer la confianza mutua en el seno de una sociedad como la nuestra en la que se da una gran pluralidad cultural, política y también religiosa".
"La cohesión social, la concordia, sentirnos próximos los unos a los otros y el respeto a los derechos de todas las personas que viven en Cataluña debe ser uno de nuestros objetivos prioritarios en este momento", según Omella.
"Mi deseo -añade- es hacer una llamada a la concordia, porque me parece que solo en un clima de concordia es posible avanzar hacia una solución justa a la situación creada que sea mínimamente aceptable para todos, con un gran esfuerzo de diálogo desde la verdad, con generosidad y búsqueda del bien común".
Según el cardenal, "últimamente hemos vivido hechos y signos positivos en esta línea. Ojalá llegaran otros y pudiéramos crear un clima nuevo. ¡Que Dios nos ayude!".
El prelado defiende que "hay que construir puentes. Y hay que fomentar una convivencia vital y confiada. La Iglesia católica debe ser un factor de cohesión social, una instancia que busque y promueva caminos de buena voluntad, caminos de esperanza y paz, caminos de comunión y no de confrontación".
Por todo ello, propone a sus feligreses que rueguen "a Dios por nuestro pueblo y que hagáis vuestra la oración de san Francisco".
Omella también hace suya una oración del Misal Romano que se refiere al propio país y la propia ciudad: "Dios, Padre nuestro, que con admirable providencia gobiernas el mundo, atiende nuestros ruegos por nuestro país, para que la sabiduría de sus autoridades y la honestidad de sus ciudadanos robustezcan la concordia y la justicia y podamos vivir en la paz y el progreso constante".
"Solo puedo añadir: que así sea. ¡Feliz diada a todos!", concluye el cardenal Omella.