Clases online: la privacidad a examen

El pasado martes la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso anunció que con la entrada en vigor de la modalidad mitad online / mitad presencial la región compraría más de 6.000 cámaras para instalar en los colegios. La medida ha levantado el recelo de muchos padres, profesores y alumnos por eso de que se grabe a menores de edad.

En primer lugar la Agencia Española de Protección de Datos legitima el uso de estas herramientas si lo que está en juego es el derecho fundamental a la educación. Ahora bien. Una cosa es lo que dice la ley pero otra es el día a dia de su funcionamiento.

En COPE hemos hablado con Beatriz Patiño. Es abogada experta en derecho digital. Lo primero, según ella, es que los padres o tutores del niño den su consentimiento por escrito. 'Cuando se hacen esas matriculaciones de esos alumnos debe expresarse que podría haber cámaras en las aulas. Si no figura en ellas hay que pedir ese consentimiento por escrito'.

La letrada asegura que aunque nos pueda parecer una novedad no lo es. En los últimos años algunas guarderías españolas ya lo han incorporado. 'Es bastante habitual la situación en la que hay cámaras y sus padres pueden ver desde el trabajo o desde su casa cómo están sus hijos'.

¿Y cómo garantizar la seguridad de estas grabaciones, de estas clases? Patiño cree que son los centros o el gobierno regional los que deben garantizarla. 'Se debe buscar una aplicación con un software que pueda ser controlado'.

Las clases a distancia no son la solución ideal y se abre para todos el curso escolar más incierto que se recuerda. Y por eso esta experta en derecho digital cree que ante las dudas debe primar la voluntad de todos de que los estudiantes no pierdan un año entero. 'Si nosotros queremos que nuestros hijos vayan a las aulas estamos en una situación muy difícil y entonces probablemente todas las decisiones que tomemos serán cuestionables. Pero lo que queremos es que nuestros hijos vayan a las aulas con la mayro protección posible'. Conjugar derecho a la educación y a la intimidad es el reto que tenemos por delante.