Detienen a una trabajadora de un centro de salud y a su hijo por sustraer datos de pacientes para obtener recetas

Agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Área de Investigación del Puesto Principal de La Orotava han detenido a una mujer de 45 años y a su hijo, un varón de 22 años, ambos vecinos del citado municipio, por sustraer datos personales de pacientes para obtener fraudulentamente recetas médicas, por lo que se les acusa de un presunto delito de usurpación de estado civil y otro de estafa.

Los hechos delictivos se produjeron a finales del pasado año, cuando la ahora detenida, aprovechando su condición de trabajadora de la limpieza en el Centro de Salud de San Cristóbal de La Laguna, obtuvo y sustrajo de forma fraudulenta diversos datos personales de pacientes del Centro, además de documentación, para posteriormente facilitárselos a su hijo.

Con esos datos, el hijo de la trabajadora solicitaba citas telefónicas en distintos Centros de Salud de la isla de Tenerife, obteniendo recetas de medicamentos que tuvieran como base opiáceos o sustancias psicotrópicas, para luego, haciéndose pasar por un familiar del paciente, acudir a las farmacias de varios municipios con la documentación hurtada y retirar los medicamentos.

Gracias a la investigación llevada a cabo por los agentes de la Guardia Civil, en la que tuvieron que realizar diversas gestiones de averiguación, así como un exhaustivo análisis de documentación, finalmente consiguieron averiguar la identidad de los presuntos autores de ambos delitos.

Los detenidos, junto con las diligencias instruidas, han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de La Orotava en funciones de Guardia.

La presunta comisión de esos hechos delictivos estaba causando un grave perjuicio a las víctimas/pacientes afectados, debido a la problemática con la que se encontraban cuando acudían a las farmacias para retirar su medicamente, el cual ya había sido previamente despachado/vendido al ahora detenido. Además del también grave perjuicio económico que estos delitos causan en el Servicio Canario de Salud.