Dos mil policías y guardias civiles se despliegan en Cataluña por la sentencia del 1-0

El objetivo es reforzar la presencia policial y apoyar a los Mossos cuando se haga pública la inminente sentencia del 'procés'

Imagen de recurso

Juan Baño

Publicado el - Actualizado

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Mil agentes de la Guardia Civil completan esta semana su despliegue en Cataluña como refuerzo a los más de 3000 agentes de verde olivo que prestan servicio en esa Comunidad Autónoma. Lo mismo ocurre con otros tantos policías de las Unidades de Intervención Policial (UIP), cerca de 1300 de una treintena de grupos de las UIP. 

El objetivo es reforzar la presencia policial cuando se haga pública la inminente sentencia del 1-O.

Parte de estos efectivos se hospedarán en hoteles y en el cuartel del Bru, en Barcelona. En el caso de la Benemérita se ha conseguido alojar al 90% del contingente de refuerzo en edificios de la propia institución armada.

Se quiere evitar imágenes que evoquen el despliegue y la intervención del 1 de octubre de 2017. Y eso tanto en el alojamiento del contingente, como en algunas intervenciones policiales que demostraron llegar tarde y mal -con escasos efectivos y sin información previa- a los colegios electorales en los que debían intervenir por orden judicial.

Si lo que pretenden los violentos es un Hong-Kong 2, no lo vamos a permitir

En esta ocasión, en contraste con la actitud especialmente hostil del gobierno de Torra con las instituciones del Estado, existe comunicación fluida entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la policía autonómica. Incluso desde Mossos se ha advertido ya desde hace días, que a partir de la lectura de la sentencia se coordinaran con Policía y Guardia Civil.

Esa fluidez en las relaciones se está materializando en las últimas fechas en reuniones periódicas entres los responsables de los tres cuerpos policiales. La última de ellas este martes, aprovechando la presencia en Barcelona de las cúpulas de Policía Nacional y Guardia civil por las celebraciones de sus patronos.

Un alto responsable de la seguridad en Madrid asegura que existe la “obligación constitucional” de fiarse del compromiso de Mossos de velar por la seguridad y respetar las órdenes de jueces y fiscales. “Si no fuera así, estaremos nosotros”, advierte. “Si lo que pretenden los violentos es un Hong-Kong 2, no lo vamos a permitir”. 

Y todo con una premisa: no cometer un sólo error, no facilitar imágenes que puedan ser utilizadas torticeramente por el independentismo más radical.