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Sánchez obliga a la presidenta del Consejo de Estado a dar el visto bueno a la 'Ley Trans'

El presidente del Gobierno, que ha tenido el anteproyecto de ley congelado durante un año, quiere que esté listo para el día del orgullo

Redacción La Tarde

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Pedro Sánchez sigue forzando y desvirtuando las instituciones sin ningún tipo de pudor. Según ha podido saber el coopresentador de 'La Tarde' de COPE Fernando de Haro, Sánchez ha intervenido para que la presidenta del Consejo de Estado, María Teresa Fernández de la Vega, se dé mucha prisa y obtenga un dictamen rápido y favorable a Ley para la Igualdad real y efectiva de las Personas trans y para la Garantía de los Derechos de las Personas LGTBI, conocida como la 'Ley Trans', como ya hizo con la presidencia del Congreso o con la Fiscalía.

El proyecto de la Ley Trans llevaba congelado desde hace un año porque es una iniciativa de Podemos y porque era rechazada por figuras señaladas del PSOE y por los grupos feministas. Si el sexo es una convención, si el sexo no es objetivo, no tiene sentido la lucha por la igualdad de las mujeres, dicen las feministas.

Pedro Sánchez no ha querido durante muchos meses inclinar la balanza entre el PSOE con sus posiciones de izquierda clásica y el progresismo disolutivo de Podemos. Pero, ahora, Sánchez ha cambiado de opinión. Ahora Sánchez quiere aprobar a toda prisa la 'ley trans' para que esté lista la semana que viene, el día del orgullo. Y para eso le ha torcido el brazo a los miembros del Consejo de Estado con la ayuda de la presidenta.

En el Consejo de Estado hay un pleno y una comisión permanente. La decisión de convocar al pleno o la permanente la toma la presidenta María Teresa Fernández de la Vega. Moncloa le ha dicho a Fernández de la Vega que convoque solo la permanente para tener un dictamen favorable. Y antes de que estén convocados los miembros de la permanente para la votación, un medio afín, una radio afín, ha anunciado esta mañana que la votación va a ser favorable a la 'Ley Trans'.

Luego a Sánchez se le llena la boca hablando de democracia y de respeto a las instituciones.

El problema de fondo de la Ley Trans

Hace un año el Gobierno presentaba el Anteproyecto de Ley para la igualdad Real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos LGTBI, elaborado por los ministerios de Igualdad y Justicia y coordinado por la vicepresidencia primera con Carmen Calvo al frente.

En su presentación en la rueda de prensa del Consejo de Ministros del 29 de junio de 2021, la portavoz María Jesús Montero destacaba que con la 'Ley Trans', "el Ejecutivo pretende superar la invisibilidad, estigmatización y falta de reconocimiento de los derechos de las personas lesbianas, gais, bisexuales transexuales e intersexuales (LGTBI) y situar a España en la vanguardia de Europa en la defensa de sus derechos", a lo que la titular de Igualdad Irene Montero, añadía que era "un día histórico en el avance legislativo de los derechos del colectivo LGTBI tras la aprobación del matrimonio igualitario hace 15 años. La futura ley es una muestra del trabajo, el diálogo y la fortaleza del Gobierno de coalición, que es aliado del colectivo, y de una forma de hacer política feminista".

Sin embargo como subrayaba la Línea Editorial de COPE de aquel viernes, ese anteproyecto "ha sido duramente criticado por los grupos feministas más clásicos. Estos grupos explican que el género es una cuestión histórica, cultural. Pero el sexo es otra cosa, es un dato objetivo: se nace hombre o mujer. Las feministas argumentan que reconocer la autodeterminación sexual en nombre de los derechos de las personas transexuales, supone negar el sexo como realidad objetiva y como categoría jurídica. Y eso va en contra de la igualdad de las mujeres. Porque las mujeres, con esta regulación, desaparecerían".

Además, subrayaba el editorial, "de lo inadecuado que es el anteproyecto de Ley Trans, existe un problema de fondo: que socialmente cada vez falta más la evidencia, la claridad y la experiencia del valor y el significado de la diferencia sexual, de que decir “yo” es tomar conciencia de estar recibiéndose a uno mismo como un hombre o una mujer".