Así es la Dirección General de Derechos de los Animales de la que presume Pablo Iglesias

Profundizamos en uno de los órganos gubernamentales de nueva creación regidos por Podemos, dependiente de Derechos Sociales y Agenda 2030

Así es la Dirección General de Derechos de los Animales de la que presume Pablo Iglesias

Millán Cámara

Publicado el - Actualizado

4 min lectura

Entre la quincena de direcciones generales creadas por el nuevo Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos, hay una que destaca sobremanera. Se trata de la Dirección General de Derechos de los Animales, dependiente de Derechos Sociales y Agenda 2030 (el ministerio / vicepresidencia de Pablo Iglesias). Ya que quizá sea el primer organismo gubernamental de este estilo, merece la pena conocer sus objetivos y quién lo dirigirá. Más si cabe por el interés que la formación morada (empezando por su líder) ha demostrado siempre con la causa animalista.

 

 

 

 

Las máximas de la Dirección General de Derechos de los Animales

Aunque todavía no cuenta con un sitio web oficial, esta rama del ministerio a cargo del líder de Podemos ya ha dejado bien claras sus prioridades. Lo ha hecho mediante las nuevas tecnologías, ya que el perfil de Twitter de la Dirección General de Derechos de los Animales se ha llenado de propósitos.

Según el primer tuit de un hilo bastante extenso, el “objetivo claro” es “garantizar el bienestar de los animales en nuestro país”. Para conseguirlo, lo primero es lograr “la implicación de las Administraciones Públicas en el bienestar animal”. En este sentido, trabajar de manera conjunta con “el sector defensor de los derechos de los animales” resultará algo primordial.

Otro punto importante para la Dirección General de Derechos de los Animales es “sacar adelante una Ley de Protección Animal que sea referente para la defensa de los animales domésticos y salvajes”. En pos de, sobre todo, “evitar escenas indignantes de maltrato”. Por ello, se elevarán las penas en el Código Penal para que la “sensación de impunidad” desaparezca.

La “normativa europea” será la que se tome como referencia a la hora de llevar a cabo las diferentes actuaciones. “Avanzar hacia la eliminación del uso de animales en circos, el sacrificio cero, acabar con el abandono de animales y fomentar las adopciones” son otras de ellas.

La Dirección General de Derechos de los Animales también resalta ímpetus como el de lograr “la unificación de las bases de datos de identificación de animales” (hoy en día “están diferenciados por comunidades autónomas”). Además de “la bajada del IVA veterinario”promover mayor “empatía” hacia los animales desde el sistema educativo, “formación para las fuerzas de seguridad del Estado” y “creación de entidades específicas de protección animal”.

Incrementar “la protección del lobo y crear “un sello único de bienestar animal” son las últimas promesas hechas públicas por un ente que, ante todo, quiere “hacer una España más respetuosa y empática con los animales”.

¿Quién está al frente de la Dirección General de Derechos de los Animales?

Sergio García Torres es el máximo responsable de intentar que las políticas que tiene el Gobierno con respecto a los animales se cumplan. Como él mismo contaba en la web de las primarias madrileñas de Podemos en 2019, ha sido activista y coordinador de varias plataformas estatales de ONG de derechos animales. También fue portavoz estatal de Podemos Animalista y coordinador técnico de la Oficina Municipalista de Podemos en la Comunidad de Madrid.

Además, estudió Artestrabajó en los equipos de comunicación de distintas ONG y empresas y ejerció, entre otros trabajos, como escultor, pintor, camarero y encuestador. Antes de ocupar este cargo a nivel estatal / gubernamental, García Torres protagonizó dos polémicas que trascendieron.

La primera tuvo lugar en 2018. Entonces, el hoy director general de Derechos de los Animales despidió a dos trabajadoras del bar vegano que regentaba en Madrid cuando estas se encontraban de baja médica. García negó la versión de las empleadas, que tildó de “injurias y calumnias”.

Meses más tarde, García Torres borró un tuit en el que afirmaba que “la leche no es necesaria” y que “somos el único mamífero que roba leche a otra especie”. También comentó que “hace siglos las calorías y las grasas podrían valer, pero ahora es absolutamente innecesario” y que consumir leche “sólo supone un maltrato animal, para que haya leche tienen que quitársela a un ternero”.

A día de hoy, el director general de Derechos de los Animales no ha dejado de emplear las redes sociales para manifestar sus opiniones con franqueza. “Despilfarrar y exterminar, la solución facilona que dan las derechas a la sobrepoblación de cotorras. Existen métodos de control ético de población que no suponen matar”, escribió, por ejemplo, el pasado 12 de febrero.

En la teoría, parece que el colectivo animal se verá reforzado gracias a este nuevo organismo. En la práctica, hay que llevar a cabo todas las medidas prometidas. ¿Será así? Y si todo llega a buen puerto, ¿con qué presupuesto se logrará? Son dos preguntas, en estos momentos, sin respuesta.

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