España y otros 10 países firman una declaración con propuestas para fortalecer el multilateralismo post-Covid

Los Gobiernos de España y otros 10 países han firmado la declaración "Juntos por un multilateralismo reforzado" en la que enumeran propuestas concretas para reforzar el multilateralismo a raíz de la pandemia de Covid-19 y tratar de que no se dé marcha atrás en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

La declaración se ha firmado con motivo de la celebración, en Madrid, de un acto institucional por el 75 aniversario de la ONU. La suscriben los jefes de Estado y de Gobierno y Altos Representantes de Bangladesh, Canadá, Corea, Costa Rica, España, Jordania, Nueva

Zelanda, Senegal, Sudáfrica, Suecia y República de Túnez, cuyos representantes han intervenido telemáticamente en el acto de Madrid.

En ella, hacen además un "llamamiento para que se reformen los tres órganos principales de las Naciones Unidas a fin de crear una

organización más ágil, eficaz y responsable que pueda mejorar su actuación sobre el terreno y adaptarse a los desafíos mundiales" y dan su apoyo al secretario general, Antonio Guterres.

Entre las medidas que apoyan estos gobiernos figura la necesidad de estudiar cómo coordinar los esfuerzos de las instituciones financieras internacionales ante la pandemia y la preparación de estrategias para reducir el riesgo financiero en los países de ingresos bajos y medianos.

Esto podría incluir formas innovadoras de obtener y movilizar financiación, abordando las consecuencias de los altos niveles de deuda y abordando "caso por caso, el tratamiento de la deuda de los países con importantes vulnerabilidades en ese ámbito y perspectivas de deterioro".

Estos gobiernos insisten, además, en asegurar "un enfoque justo y eficaz para hacer frente a los retos fiscales que plantea la digitalización de la economía, apoyando las negociaciones en curso en el Marco Inclusivo de la OCDE".

También hablan de aumentar la ayuda oficial al desarrollo, "apoyando una financiación básica previsible, oportuna y flexible del sistema de las Naciones Unidas para el desarrollo", así como el acceso a la financiación en condiciones favorables para los países menos adelantados (PMA).

Por otro lado, muestran su "apoyo inquebrantable al sistema de comercio multilateral basado en normas, con la Organización Mundial del Comercio (OMC) en su centro", y su "respaldo a los continuos esfuerzos por reformar la OMC para que sea lo más eficaz posible".

La declaración habla de "reducir la desigualdad y no dejar a nadie atrás", con compromisos como luchar contra la pobreza y apoyar "una migración segura, ordenada y regular como medio para

reducir la desigualdad mundial". También habla de revertir el aumento del hambre, la malnutrición y la pobreza rural "exacerbada por la pandemia" y fortalecer el diálogo social.

Asimismo, proponen medidas para mejorar la preparación y la eficacia del sistema sanitario global y trabajar para "un acceso global equitativo, transparente, oportuno, sensible a las cuestiones de género y asequible, a los instrumentos nuevos y a los ya existentes, especialmente a las vacunas, pruebas de diagnóstico y

tratamientos seguros".

EVENTO DE ALTO NIVEL SOBRE SALUD

Los firmantes quieren trabajar con Guterres para convocar un evento de alto nivel de las Naciones Unidas sobre la salud mundial, con el objetivo de promover sistemas de salud fuertes y resilientes, con especial énfasis en la atención sanitaria primaria, incluidos los servicios de salud sexual y reproductiva.

Además, proponen medidas para reforzar la lucha contra el cambio climático y para apoyar la paz y la seguridad mundiales Apoyando la Resolución 2532 del Consejo de Seguridad y el llamamiento del secretario general a un alto el fuego mundial para finales de 2020, "actuando activamente a favor de su aplicación" en las relaciones bilaterales y multilaterales.

También quieren garantizar que se permita el acceso humanitario a los que precisan asistencia, sin obstáculos ni demoras, apostar por la prevención de conflictos y apoyar la integridad de independencia del TPI.

Entre las medidas también figuran propuestas para la defensa los derechos humanos, la democracia y la igualdad de género y para "aprovechar la revolución digital", promoviendo un acceso global y que respete los derechos humanos y las libertades fundamentales, además de tener en cuenta la dimensión de género en la brecha digital.