El Gobierno pide a Torra que deje ya su "monólogo"
"Diálogo y ley" es la respuesta del Ejecutivo a la apelación de Torra a "sublevarse ante la injusticia" y "hacer caer los muros de la opresión".
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El Gobierno ha insistido en que "diálogo y ley" son la respuesta "al monólogo independentista", después de que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, dijera ayer que 2019 ha de servir para "sublevarse ante la injusticia" y "hacer caer los muros de la opresión".
Fuentes de Moncloa han reiterado que "hay salidas para resolver los problemas y las necesidades de todos" pero "dentro de la Constitución y con los valores propios de una democracia".
En esa línea, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha afirmado que Torra sigue en una "suerte de monólogo" con un discurso de fin de año dirigido "a un determinado sector", cuando "tenía que estar concentrado en dar respuesta a los problemas de Cataluña" y a la "crisis de convivencia".
Y ha añadido que el Gobierno, frente a ese monólogo, va a concentrarse a su vez en posibilitar que haya un diálogo que se produzca dentro de la ley.
El presidente de la Generalitat indicó ayer en su discurso de Fin de Año que 2019 "tiene que servir para realizar el mandato democrático de libertad, para sublevarse ante la injusticia y para hacer caer los muros de la opresión".
Torra apeló a la "unidad de los demócratas" para conseguir el próximo año "el mandado democrático de libertad" y pidió al Gobierno español "voluntad de encarar un diálogo creíble, sincero y valiente" que posibilite "una solución democrática y política".
Además de solicitar a los ciudadanos que redoblen "tiempos y esfuerzos para tomar de nuevo la iniciativa", indicó que 2019 será un año de "de desafíos mayúsculos".
No sólo el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha reaccionado a las palabras del presidente de la Generalitat, tanto PP como Ciudadanos han acusado a Torra de haber llamado a la sublevación y han exigido al presidente del Gobierno que reaccione y "ponga orden" frente al desafío independentista.
El líder de los populares, Pablo Casado, ha culpado al presidente de la Generalitat de "arengar a la violencia" en su discurso de Fin de Año: "Llama a la sublevación y arenga a la violencia para consumar la secesión en una nueva vuelta de tuerca".
Casado ha asegurado en su cuenta de Twitter que "el independentismo está descontrolado", a la vez que ha solicitado al presidente del Gobierno que "ponga orden" porque "esta nueva amenaza no puede quedar impune".
"¿A qué espera Sánchez para poner orden y preservar la unidad de España? 155 ya", ha subrayado.
También desde el PP, su vicesecretaria de Estudios, Andrea Levy, ha considerado que el discurso del presidente catalán fue "un disco rayado" con "apelaciones peligrosas" a sublevarse y ha pedido al Gobierno que desarticule "el comando de rebelión" que tiene en Cataluña y aplique el artículo 155.
Para la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, el citado discurso es "la ratificación del golpe" del separatismo catalán, además de "una nueva llamada a la sublevación y al conflicto".
Arrimadas ha asegurado que Torra es un "peligro público" para la convivencia en Cataluña, ha criticado que se mantenga en el poder únicamente "porque Pedro Sánchez le necesita" y ha lamentado que no se haya referido a la "realidad social" de los catalanes.
La política de Ciudadanos ha sostenido que mientras el presidente del Gobierno "no reaccione", habrá "un peligro público al frente de la Generalitat".
A juicio de la presidenta del grupo Catalunya en Comú Podem en el Parlament, Jèssica Albiach, las palabras del presidente de la Generalitat evidencian "los bandazos del Govern" y "la descomposición del espacio independentista".
Según Albiach, que ha denunciado que en el discurso haya habido "grandes silencios", Torra "no tiene credibilidad" ni "permite avanzar".
También el PSC se ha referido al mensaje de Fin de Año de Torra: su secretario de organización, Salvador Illa, ha lamentado que retomara "posiciones unilateralistas que han hecho mucho daño", lo cual "no permite avanzar hacia una solución acordada".
Illa ha censurado que el president se dirigiera "solo a la mitad de los catalanes y no a su conjunto" y ha insistido en que "la única solución posible es rehacer el acuerdo entre catalanes", para lo que ha pedido a la clase política que haga "un esfuerzo".