Normalidad en los controles fronterizos, con poco tránsito y algún despistado

Las primeras horas del control en los pasos fronterizos entre Extremadura y Portugal han estado marcadas por el reducido movimiento de vehículos y dentro de la normalidad.

La activación del artículo 28 del Código de Fronteras Schengen, que permite restablecer temporalmente los controles en las fronteras interiores, ha sido adoptada ante la necesidad de "habilitar la posibilidad de restringir movimientos de personas" por resultar incompatibles con las medidas adoptadas dentro de los territorios.

En Extremadura, todos los pasos están siendo controlados entre la Policía Nacional, que asume la vigilancia de Caya y Valencia de Alcántara, y la Guardia Civil, que está a cargo del control de 14 pasos, algunos de los cuales han sido cerrados con obstáculos pasivos por la policía portuguesa, también presente en los mismos.

En el paso fronterizo autorizado de Marvao-Valencia de Alcántara (Cáceres) la normalidad también impera en estas primeras horas del cierre de fronteras, donde el tráfico de camiones de mercancías es escaso, así como el de vehículos particulares, algunos por despiste y otros por necesidades debidamente justificadas.

De hecho, y como en el resto de puntos, solo se permite el acceso a España a los ciudadanos de este país, residentes en España, trabajadores transfronterizos, a quienes acrediten causas de fuerza mayor o situación de necesidad y al transporte de mercancías.

En concreto, unidades del Cuerpo Nacional de Policía y de la policía lusa controlan este punto, en la que convergen la carretera N-521 de España y la vía lusa 246-1.

Los vehículos españoles que tratan de cruzar a Portugal son parados por la policía lusa para preguntar motivos y requerir documentación, y son los efectivos españoles los que realizan idéntica labor de control para los vehículos portugueses.

Los camiones de mercancías, principalmente los españoles, son los que en un mayor número centran el tráfico en este punto, aunque también ha habido, aunque escasa, circulación de turismos.

Una caravana de franceses procedente de Portugal ha tenido que dar la vuelta a la llegada de este paso, y a otra, también con ocupantes de ciudadanos franceses que estaban en Portugal, se le ha permitido el paso hacia España por una cuestión médica.

Al parecer, uno de sus ocupantes presentaba un cuadro clínico no relacionado con el coronavirus que precisaba revisión asistencial en el país galo.

Además, las unidades policiales españolas han impedido a un conductor portugués su paso hacia España donde pretendía repostar En el punto fronterizo de Badajoz-Caia (Portugal), el desarrollo de estos controles se realiza con normalidad dentro de las restricciones marcadas.

A lo largo de esta mañana, unidades de la Policía Nacional y de Portugal han parado a varios turismos para comprobar que sus desplazamientos se ajustaban a lo establecido. Algunos de ellos han tenido que regresar a sus respectivos países por orden de los efectivos policiales.

Por contra, los camiones de mercancías han circulado con normalidad por este paso.

El Centro de Coordinación Operativa Policial de Extremadura se ha reunido este martes en la Delegación del Gobierno para abordar las novedades respecto a la situación provocada por el coronavirus en el país y en Extremadura, y dar salida a las cuestiones y situaciones generadas en torno a la misma.

Una de estas cuestiones han sido las relacionadas con el tránsito y situación de la frontera con Portugal, tras el restablecimiento de los controles en las fronteras terrestres.