El PSOE quiere frenar la tensión con Podemos: "El ruido es una apuesta perdedora para la izquierda"

En La Moncloa temen quedar atrapados en la hostilidad de Podemos y desaprueban actitudes como la de la "número dos" de Igualdad contra Santiago Abascal. "El ruido", avisa el núcleo duro socialista, "es una apuesta perdedora para la izquierda". La ruptura con la reforma del 'solo sí es sí' ha marcado el pistoletazo de salida votaciones en las que las dos patas de la coalición adoptan posiciones contrarias en las Cortes, consolidando sus trincheras.

El pleno ha reclamado estas últimas horas al Gobierno más explicaciones sobre la ayuda a Ucrania. Los socialistas renegaron obviamente de la iniciativa, mientras los morados las respaldaban. De la misma manera, el PSOE avaló, sin el apoyo de Unidas Podemos, los esfuerzos de la OTAN y la Unión Europea, además del envío de carros de combate Leopard dentro de la aportación militar para frenar la ofensiva rusa.

Las grietas entre los socios de gobierno prometen sucederse cuando continúa pendiente una comparecencia de Pedro Sánchez para informar ante el hemiciclo de la contribución española para mayor calvario del presidente. La brecha seguirá trasladándose también al bloque de la investidura.

El ejemplo de la división

Las refriegas van a seguir sucediéndose en el Gobierno o eso al menos temen en la misma Moncloa y eso lo han podido comprobar en estas últimas horas en las votaciones en el Congreso. Podemos ha llegado a hacer pinza con el PP para fiscalizar la contribución militar en Ucrania. Consolidadas las trincheras, el núcleo duro presidencial alerta contra el desgarro que vive la coalición.

"La batalla interna", avisan, "es perdedora para la izquierda". Aún confían en que los morados eviten presentar una enmienda a la totalidad a la reforma del 'solo sí es sí', lo cual retrasaría de facto la tramitación y les permitiría estirar la confrontación. Tampoco se llaman a engaño los socialistas ante la tendencia de su socio a actuar por la vía de los hechos. Para muestra, la salida de Ángela Rodríguez Pam contra Santiago Abascal, que, a sus ojos, solo sirve para dar argumentos a la derecha.