¿Qué son las olas monstruo eléctricas y por qué podrían provocar un gran apagón?

¿Puede producirse un apagón eléctrico en todo el mundo? Es una pregunta a la que tratan de responder expertos de todo el mundo. Y también ciudadanos. Es una circunstancia para la que ya se están preparando algunos países, como Austria, que ya ha realizado maniobras para ensayar la respuesta a un posible gran apagón causado por una sobrecarga eléctrica.

En el marco de la maniobra, realizada en una estación de esquí cerca de Innsbruck, el Ejército simuló la reconstrucción de una torre eléctrica dañada para restablecer el suministro eléctrico.

"La cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuándo", sentenciaba hace meses la ministra de Defensa de Austria, la conservadora Klaudia Tanner, que supervisaba una serie de iniciativas de concienciación sobre lo que aseguraba que es "un peligro real, pero subestimado".

Para explicar este hipotético fenómeno, algunos expertos del CSIC han hablado de las denominadas "olas monstruo eléctricas". Se trataría de la propagación de la corriente de la red eléctrica de un modo descontrolado. Una situación que podría evitarse si todos los sistemas que vuelcan electricidad en la red están sincronizados.

El fallo se produciría porque, si la frecuencia no está correctamente afinada en la red, puede suceder que la tensión baje a cero en determinados sitios (y esto provoque apagones en cascada) y que en otros la potencia se junte por completo, sea 10 o 20 veces superior de lo que tendría que ser y se sincronice. Por tanto, y solamente cuando esto ocurre, las estaciones transformadoras y las líneas de alta tensión podrían desintegrarse y dar paso a un desastre.

¿Cuáles son los riesgos de una gran red interconectada?

Este tipo de "turbulencias" en la red eléctrica, según explican los expertos, podrían convertirse en un riesgo para la Red Eléctrica Española y el regulador europeo. Por ello, las personas competetentes para su vigilancia las siguen muy de cerca. De hecho, las posibilidades de que puedan surgirles problemas de este tipo han aumentado ya que se han instalado cada vez más sistemas renovables y las anomalías se producen con una mayor frecuencia propagándose en tiempos muchos más cortos.

Por suerte, España es uno de los países más seguros en materia de suministro energético de Europa y uno de los menos expuestos a la posibilidad de que se produzca un apagón prolongado. "Las posibilidades de que podamos tener un gran apagón o una crisis de suministro en España son muy reducidas", ha explicado en una entrevista a una agencia de noticias otro experto en la materia, que argumentaba que el sistema gasista español está "muy experimentado" y "muy bien gestionado".

Además, nuestro país tiene las fuentes de suministro energético muy diversificadas y cuenta con alternativas y acuerdos que le garantizan poder importar gas, con independencia de que vaya a tener que pagar un precio más elevado que en tiempos pasados.