SIGAUS gestiona 4.414 toneladas de aceites industriales usados en Aragón en 2023, procedentes de 1.900 establecimientos

Europa Press

Publicado el - Actualizado

4 min lectura

El sistema de gestión de aceites industriales usados en España, SIGAUS, ha gestionado en 2023, 4.414 toneladas de este residuo en Aragón, procedentes de 1.969 establecimientos de diversa tipología, siendo el 41% procedentes de talleres mecánicos. Se trata de un residuo que puede ser aprovechado en su totalidad y utilizado en la fabricación de nuevos productos, como bases lubricantes o fuel BIA

La gestión del aceite industrial usado en Aragón es un modelo ejemplar de cómo un residuo peligroso es recogido en cualquier punto geográfico donde se genera y aprovechado como materia prima o energía. Su gestión requiere de un sistema logístico que llegue a todos los rincones en los que se produce una gota de aceite usado, lo que incluye una diversidad de actividades.

En Aragón, 1.969 establecimientos e instalaciones generaron aceites usados en 2023. En ellos SIGAUS recuperó 5.238 toneladas brutas de residuo (incluyendo un 15,7% de agua y sedimentos), a través de 4.961 operaciones de recogida en 283 municipios aragoneses, según los datos aportados por SIGAUS.

El 41% de estos puntos generadores fueron talleres de reparación de vehículos, entre los que se incluyen establecimientos multimarca, concesionarios y talleres independientes. En ellos se recuperó el 38% (2.002 toneladas) del aceite usado que se generó en Aragón durante el pasado año.

El 62% restante se recogió en la industria y otros muchos sectores, como el transporte, la energía, la construcción, la agricultura, la hostelería y los servicios públicos (desde puntos limpios municipales o comarcales, hasta centros educativos, hospitales y fuerzas de seguridad y emergencias).

ÁREAS DE ESPECIAL DIFICULTAD

El aceite industrial usado se genera de forma muy extendida y dispersa en todo el territorio, y especialmente atomizada en zonas rurales o de montaña, a menudo alejadas de los grandes núcleos urbanos y con menor densidad de población, donde se eleva el nivel de exigencia para el servicio de recogida.

Durante el pasado año, el 93% de los municipios aragoneses en los que se efectuaron recogidas fueron rurales. En estas áreas se recuperaron 2.166 toneladas de aceites industriales usados, el 41% de la cantidad total recogida.

En las zonas de montaña, donde la orografía aporta una complejidad adicional para el servicio de recogida, se recuperaron 342 toneladas en 75 municipios. Por otra parte, en 182 municipios de menos de 1.000 habitantes se recogieron 454 toneladas de aceite usado.

Adicionalmente, en zonas próximas a espacios naturales protegidos es especialmente importante la recuperación del residuo. En estos entornos se recogieron 14 toneladas de aceites usados, que se generaron en 9 establecimientos ubicados en las cercanías de 5 espacios protegidos. Un ejemplo, fue la recogida de 8 toneladas en la Reserva de la Biosfera de Ordesa-Villamala.

El aceite usado puede ser especialmente nocivo en entornos hídricos, como ríos, lagos o embalses, porque no es biodegradable y por su capacidad de infiltración y bioacumulación. Se estima que el vertido de un litro de aceite usado puede contaminar un millón de litros de agua, y puede perdurar durante 15 o 20 años, impidiendo su oxigenación y dañando los ecosistemas acuáticos.

En el entorno de recursos hídricos de Aragón se recuperaron 216 toneladas de aceites usados generados en 116 puntos de generación. Un residuo valioso con infinitas vidas.

El aceite usado conserva en su composición recursos que le permiten ser aprovechado en su totalidad, transformándolo en nuevos productos, como bases lubricantes o un combustible similar al fuel óleo.

La cantidad recogida en Aragón durante el pasado año fue valorizada en su totalidad, una vez excluidos los impropios --agua y otros sedimentos--. Del residuo neto finalmente gestionado (4.414 toneladas), el 34% se destinó a regeneración, tratamiento prioritario por ley que permite transformar el residuo en bases lubricantes, que son el componente fundamental en la fabricación de nuevos aceites industriales. Así, fue posible reincorporar al mercado 937 toneladas de nuevos lubricantes, suficientes para llenar el cárter de cerca de 231.400 coches.

El segundo tratamiento posible para el aceite usado es su descontaminación para obtener un combustible llamado fuel BIA, que sustituye al fuel óleo tradicional, y que puede ser utilizado en centrales térmicas, hornos y otras instalaciones industriales. Mediante este proceso se trataron 2.917 toneladas de residuo.

La obtención de estos productos a partir del aceite usado evita el uso de petróleo: 740.772 barriles se ahorraron por la gestión llevada a cabo en Aragón. Además, se evitó la emisión de casi 2.600 toneladas de CO 2 y se ahorraron 22 GWh de energía.

Programas

Último boletín

02:00H | 20 OCT 2024 | BOLETÍN