El Gobierno descarga en la “autonomía” de la Fiscalía el archivo de la investigación sobre el Rey emérito

El regreso de Don Juan Carlos a España es una alternativa cada vez más descontada en el seno de La Moncloa. La dilación de la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, en el archivo de las investigaciones en torno a los supuestos fondos de Don Juan Carlos en Jersey, tal y como ha revelado Herrera en COPE, aflora ya como el decisivo obstáculo para su vuelta. Y ello a pesar de que el Gobierno se cuide de establecer una relación causa-efecto.

Como todo lo referido a la Casa Real, el Ejecutivo apuesta por la prudencia ante la anómala situación del Rey Emérito. Prefiere evitarse ir un paso más allá del considerado conveniente en cada momento. El asunto se ha ido despachando oficialmente con alusiones a la fluida relación con la actual Jefatura del Estado, mención incluida a menudo a la “ejemplaridad” de Felipe VI. El escenario, sin embargo, ha cambiado ante la constatación hecha pública por Herrera en COPE de estar alargándose el cerrojazo definitivo tras prácticamente dos años de indagaciones.

En el ojo del huracán aparece irremediablemente la jefa del Ministerio Público y el recordatorio de su puerta giratoria sin solución de continuidad desde el departamento de Justicia. Dado que el horizonte aprieta, es doctrina asentada en La Moncloa tirar de la “autonomía” del trabajo de Delgado, apuesta personal de Pedro Sánchez. Ni media palabra, en cualquier caso, ante el cúmulo de daños generados sobre la figura del Rey Emérito.

El entorno del presidente del Gobierno contempla el retorno de Don Juan Carlos como una opción más que probable una vez la fiscal general dé carpetazo al caso. Más aún ante los deseos del ex jefe del Estado de poder vivir de en España en cuanto se den las circunstancias oportunas y éstas en ningún caso creen inestabilidad a Felipe VI. Así se lo trasladó a Carlos Herrera. Con todo, La Moncloa abriga dudas sobre cómo gestionar el regreso.

Desde el equipo de Pedro Sánchez gustan inhibirse descargando la decisión última en La Zarzuela. No obstante, intramuros del palacio presidencial van generalizando la idea de “normalizar” la vuelta de Don Juan Carlos, incluso hay estrechos colaboradores del jefe del Ejecutivo que vienen atribuyendo a Su Majestad “más foco permaneciendo en Abu Dabi”. La mayor prevención de la órbita socialista ni siquiera procede de una contestación de su base electoral sino que viene de Unidas Podemos y su hostil incompatibilidad con la Corona.