La Moncloa blinda a Sánchez: “El caso Ghali nunca llegó a su mesa”

La órbita presidencial deja sola a la ex titular de Exteriores, aunque dice confiar en el carpetazo judicial

La Moncloa blinda a Sánchez: “El caso Ghali nunca llegó a su mesa”

Ricardo Rodríguez

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

El Gobierno está lejos de encajar la imputación de Arancha González Laya. Todo un lastre ante el que La Moncloa pone tierra de por medio para mantener la protección a Pedro Sánchez. “La entrada en España del líder del Frente Polisario nunca llegó a la mesa del Presidente”, difunden en su entorno después de haber rechazado Pedro Sánchez aclarar si fue él quien, a la postre, dio la orden. Tal extremo lo llegan a dejar en alguna que otra área gubernamental, si acaso, “en la antesala de su despacho” y “de manera informal”.

La cuadratura del círculo que refleja la soledad de la ex titular de Exteriores pasa por impugnar que el caso Brahim Ghali llegara a ser objeto de deliberación en seno del Consejo de Ministros. Aun así, llegaron a ser evidentes las discrepancias de criterio a varias bandas entre miembros del Gobierno y, en concreto, tanto el responsable del Interior, Fernando Grande-Marlaska, como la de Defensa, Margarita Robles, alertaron de las consecuencias de una acción que supuso el estallido de las relaciones con Marruecos y la oleada migratoria en Ceuta.

El caos se instaló en el Gabinete y reveló falta de coordinación ministerial, responsabilidad entonces de la vicepresidenta Carmen Calvo, ante la magnitud de una tensión desencadenada con el vecino del Sur que todavía debe ser zanjada y representa una prioridad del actual jefe de la diplomacia, José Manuel Albares. Los pasos dados en ese sentido irían por un buen camino. Sánchez vislumbra estar ante la “gran oportunidad” para restablecer las relaciones bilaterales.

En lo inmediato, no hay palabras de aval público hacia González Laya, más allá del genérico aserto de Sánchez, en su comparecencia ante la prensa de este miércoles, según el cual “el Ejecutivo hizo lo que debía” y “como debía” con la acogida de Ghali. Y, descontado, “conforme a la ley”. Llevaba el jefe del Ejecutivo la respuesta preparada por su equipo, así que se atornilló a ese mensaje. El ejercicio ha ido acompañado de una consigna de manual emitida desde la órbita monclovita de aguardar acontecimientos, con la esperanza puesta, incluso la convicción de cercanos al Presidente, en el carpetazo judicial. Descuentan el archivo de la causa como consecuencia de la futura declaración de González laya ante el juez.

“Si hubiera novedades de otra índole en el juzgado de instrucción 7 de Zaragoza, inciden en el núcleo de La Moncloa, veríamos”.