Objetivo de La Moncloa: “Reinventar” a Sánchez para frenar el desgaste
La alarma en los círculos socialistas lleva a intentar humanizar al Presidente como uno de los ingredientes de la receta elaborada por su equipo
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“No le van a torcer el brazo al Presidente”. Es la máxima en La Moncloa y en Ferraz, con el miedo metido en el cuerpo ante un paisaje mucho más desolador del que públicamente admiten, ya que el futuro se vislumbra negro para sus intereses. La amenaza de un recrudecimiento de la crisis está sobre la mesa y en distintos ámbitos gubernamentales se dispara la inquietud. “Vienen meses complicados”, admiten puertas adentro.
Por ello, a la vista de que la economía va a ser el campo de batalla electoral, lo único que les queda – sostienen desde el equipo presidencial – es trabajar en el intento de reconquistar la confianza de la opinión pública. Un esfuerzo mayúsculo, toda vez muchos cuadros reconocen que “en las sedes”, es decir, en las federaciones donde habrá elecciones municipales y autonómicas el 28 de mayo, cunde el desánimo y existe miedo a perder poder territorial, lo que empieza a antojarse un hecho más que posible ante un inicio de curso marcado por una inflación desbocada y una crisis energética sin precedentes.
La campaña de autobombo bajo el lema “El Gobierno de la gente” pretende explicar al español de a pie las medidas desplegadas y la tarea por hacer en lo que queda de mandato, toda vez uno de los lamentos más habituales en las estructuras socialistas ha venido siendo una total falta de comprensión interna sobre por qué las encuestas dibujan un panorama adverso. A su entender, han hecho lo que debían para mitigar, primero, las consecuencias de la pandemia y, ahora, de la guerra de Ucrania. “El Ejecutivo nunca ha navegado sobre aguas plácidas, pero quedan metros hasta la meta”, gusta incidir en privado el mismo Pedro Sánchez.
En una vuelta de tuerca a su estrategia de proximidad, Sánchez inaugura el curso este lunes, 5 de septiembre, con un acto propagandístico entre los muros del Palacio de La Moncloa que, según el enunciado de la Secretaría de Estado de Comunicación, “tiene a los ciudadanos como protagonistas”. La idea elaboradora por sus gurús recuerda a la del programa de TVE, emitido hace más de una década, “Tengo una pregunta para usted”, aunque, al objeto de ahorrarse sorpresas, los cincuenta participantes han sido convenientemente seleccionados por el equipo presidencial, para formular sus dudas a Sánchez. La residencia del Presidente pasa así a convertirse, de forma inédita, en un plató con la SEC distribuyendo la señal en directo.
Al margen de venderse cercano a los españoles, el show televisivo debe apuntalar - sin riesgos a sufrir abucheos - la convicción de Pedro Sánchez de que posee sobrados argumentos para blandir su gestión. “Cree hacer lo correcto”, defienden quienes acostumbran a despachar con él “que tiene olfato y sabe perfectamente lo que pasa en la calle”. La escenificación permite desplegar una pretendida pedagogía, también al servicio de “desenmascarar al PP”. De hecho, la maquinaria socialista está en marcha para afianzar el giro a la izquierda y situar a Alberto Núñez Feijóo en el bando de los “agoreros”, de la mano de las grandes empresas, en detrimento de la mayoría social. El cara a cara entre presidente del Gobierno y líder de la Oposición de este martes en el Senado servirá, auguran los suyos, a ver “la imagen del mejor Sánchez”.