Macron, ante una nueva prueba de fuego: 150 manifestaciones para reclamar la subida del salario mínimo

Los convocantes de la huelga que se vive en Francia este martes no están cosechando los apoyos que requerían. Una parte de los sindicatos franceses, liderados por la Confederación General del Trabajo (CGT), mantienen el pulso contra el gobierno de Emmanuel Macron con una huelga "intersectorial" para reclamar subidas salariales -los huelguistas quieren que el salario mínimo alcalce los 2.000 euros-, y que es una prolongación del conflicto que se vive desde hace cuatro semanas en varias refinerías y que mantiene a muchas gasolineras sin una gota de carburante.

El paro de este martes afecta a sectores clave para el funcionamiento normal de la actividad como trenes, educación, personal sanitario y transportes públicos. Los paros van acompañados con alrededor de 150 manifestaciones por todo el país.

En el transporte por ferrocarril, los mayores problemas van a estar en los trenes de cercanías de París y en los regionales, ya que entre estos últimos solo circulan la mitad, según las previsiones de la compañía estatal SNCF.

En los servicios de largo recorrido el impacto va a ser mucho menor, sobre todo en los trenes de alta velocidad (TGV), que en su mayor parte funcionan casi normalmente, lo mismo que ocurre en las líneas internacionales. En las conexiones entre Francia y España, el tráfico estará "ligeramente perturbado", de acuerdo con la SNCF.

En la educación, muchos padres no pueden llevar a sus hijos a las guarderías por falta de personal y también se espera la cancelación de clases en primaria, en secundaria y, en particular, en los liceos profesionales.

Philippe Martínez, el secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT), que lidera la jornada de huelgas y manifestaciones en Francia este martes, quiere un incremento de 300 euros del sueldo mínimo, hasta 2.000 euros brutos.

"El salario mínimo no ha aumentado lo suficiente", subrayó Martínez en una entrevista con la emisora RTL al comienzo de esta jornada de protestas en que la CGT, apoyada por otros tres sindicatos menores, prevé cerca de 150 manifestaciones por todo el país, la principal en París a partir de las 14.00 locales (12.00 GMT).

Martínez reprocha al Gobierno de Emmanuel Macron su actitud en contra de esa exigencia, que se podría haber materializado, a su parecer, con un mecanismo de revalorización automática de los salarios en una ley en favor del poder adquisitivo que se adoptó en julio.

Insistió en que en julio ya lo plantearon y en que llevan avisando "desde hace mucho tiempo" de sus demandas al Gobierno, que ha hecho oídos sordos. Justificó el recurso a la huelga porque a su parecer en Francia es la única forma para que cambien las cosas.

"Estoy llegando antes de mi hora, mejor que otros días"

La corresponsal de COPE en París Asunción Serena está sondeando a los parisinos en uno de los puntos neurálgicos de la capital francesa, los Campos Elíseos, sobre cómo les está afectando estos paros y, al contrario de lo que podría ser, muchos admiten que han conseguido llegar al trabajo mejor que los días normales.

Es el caso de Esteban que trabaja en eventos, "estoy llegando incluso antes de la hora, no he encontrado ningún problema".

María que trabaja en restauración admite que se ha encontrado una situación mejor que el resto de días, "no he tenido ningún problema es como si no hubiera huelga".