¿Puede 'caer' Putin? El muro de seguridad infranqueable que rodea al presidente ruso

Putin ha sido Teniente Coronel del KGB, lo que le permite saber cómo viajar, dónde vivir o qué comer para prevenir cualquier ataque

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María Bandera

Publicado el - Actualizado

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Lo que se presumía como una invasión fugaz de Ucrania ya va camino de cumplir los dos meses, una situación que ha sobrepasado cualquier previsión, incluso las del propio presidente ruso, que no se esperaba encontrar con la férrea oposición ucraniana.

La extensión del conflicto dificulta vislumbrar cómo y cuál podría ser su fin ya que se abre un amplio abanico en el que la variable actualidad juega un papel crucial. Rafael López del Rincón, autor de numerosos artículos sobre geopolítica y estrategia digital, que ha trabajado en el Departamento de Relaciones Ruso-Americanas en el World Affairs Council of Saint Louis en EEUU, baraja seis posibles escenarios. "En el primero, Rusia gana la guerra con rapidez. En el segundo, la guerra se enquista y se alarga más de medio año. En tercer lugar, Rusia pierde la guerra contra Ucrania. Cuarto, se alcanza una solución diplomática que satisfaga tanto a Rusia como a Ucrania y a Occidente. Quinto, se depone internamente al presidente Putin. Sexto, la Tercera Guerra Mundial". Todo sin olvidar las posibles "combinaciones" entre escenarios.

Rusia no permite las derrotas militares

Para el experto, después de que Putin "haya llevado a la economía rusa y al rublo al filo del abismo y convertido a Rusia en una nación paria a nivel internacional, una derrota a manos de Ucrania no quedaría impune a nivel interno".

Rusia, advierte López del Rincón, "no permite las derrotas militares, y un derrocamiento interno de un líder que lleva 22 años en el poder y que se ha convertido en el enemigo número uno del mundo, sólo podría acabar con su asesinato", advierte.

Pero ¿por qué Rusia no permite derrotas militares? ”Cada una de las grandes derrotas de Rusia en una conflagración bélica en los dos últimos siglos ha conllevado un cambio político radical".

López del Rincón recuerda que a causa de la Guerra de Crimea (1853-1856) "el Emperador Alejandro II se vio abocado a emprender una reforma liberal, que se originó en las altas esferas, y, finalmente, fue asesinado por un revolucionario". También que "la primera Revolución Rusa de 1905 fue consecuencia de la derrota rusa en la Guerra Ruso-Japonesa de los años 1904 y 1905" o que "la debacle rusa en la Primera Guerra Mundial culminó en la abdicación del zar Nicolás II y en la Revolución Bolchevique".

Putin nunca se desplaza en helicóptero, sino en caravanas masivas de vehículos terrestres blindados

LIBERTAD POR GRANDEZA

Rusia tiene una larga y rica tradición de líderes de carácter autocrático; los zares. "Ostentaban el poder con mano de hierro y cuanto más beligerantes y terribles eran -desde Iván el Terrible hasta Stalin-, gozaban de más popularidad entre la población".

A su juicio, este "sacrificio" del pueblo ruso abocado a prescindir de sus libertades individuales no es gratis. "Tiene la contrapartida de incrementar la grandeza, el prestigio y los territorios del Imperio ruso". Y de no ser así, lo pueden pagar muy caro, "bien con un cambio político drástico y, a menudo, con el derramamiento de la sangre del Zar".

Una derrota a manos de Ucrania no quedará impune a nivel interno

LOS CUATRO CÍRCULOS

López del Rincón no ve "posible" que Putin se "retire pacíficamente de la política para dedicarse a vivir la buena vida en Niza o Marbella, como si fuera un oligarca más". Por eso "se preocupa obsesivamente por su propia seguridad y por el control de sus rivales potenciales".

No hay que olvidar que Putin ha sido Teniente Coronel del KGB, por lo que esta experiencia "le da una ventaja para prevenir ataques contra él".

Para ello, el Servicio de Seguridad Presidencial de Rusia que se encarga de proteger tanto a Putin como a su familia, y a otros políticos relevantes "se organiza en los actos públicos en cuatro círculos concéntricos". "El primer círculo de seguridad, y el más cercano, es el de sus guardaespaldas. El segundo, se compone por los agentes infiltrados de incógnito entre el público. El tercero, tiene como misión rodear al público para bloquear cualquier potencial ataque por parte de personas sospechosas. El cuarto es el más amplio y está compuesto por francotiradores ubicados a una mayor distancia en tejados de los edificios circundantes".

Además, Putin "nunca se desplaza en helicóptero, sino en caravanas masivas de vehículos terrestres blindados". También "se bloquean los drones que pudiera haber en el espacio aéreo".

AISLAMIENTO Y CATADORES

Como ha señalado Mark Galeotti, experto en seguridad rusa y director de Mayak Intelligence, "Putin vive muy aislado. El círculo de personas que lo rodea ha disminuido drásticamente" desde la pandemia de la Covid-19. Para poder ver en persona a Putin “es obligatorio pasar una cuarentena de dos semanas, un examen médico y someterse regularmente a test PCR, entre otras medidas”.

Putin tiene especial cuidado con la comida para evitar que le envenenen. Para ello cuenta con "catadores personales e incluso sus guardaespaldas asisten a la preparación de sus alimentos". En actos públicos o en viajes, "Putin lleva su propia comida y bebida. Y, a nivel electrónico, tiene prohibidos los smartphones en el Kremlin".

EL PAPEL DE LOS OLIGARCAS

Rafael López Rincón no ve opciones a los intentos de los oligarcas por deponer a Putin, no "por falta de ganas", sino por "carecer de la capacidad para lograrlo con éxito". Precisamente, "los oligarcas que no están ya en la cárcel o en el exilio, son objeto de la mayor vigilancia posible, por lo que un movimiento suyo en falso significa su muerte".

En el "improbable" caso de que Putin pudiera llegar a ser depuesto, se plantearía "un escenario muy volátil e inestable, que podría desembocar en una guerra civil entre distintos ‘siloviki’ y oligarcas por el poder en Rusia", ha concluido López del Rincón.