Más de 2,5 millones de niños sursudaneses sólo han conocido la guerra
Unicef calcula que 19.000 niños continúan sirviendo como combatientes, cocineros, porteadores y mensajeros y sufriendo abusos sexuales
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Tres de cada cuatro niños nacidos en Sudán del Sur desde su independencia de Sudán hace siete años, lo que supone 2,6 millones de menores, sólo han conocido la guerra que estalló a finales de 2013, según ha indicado el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). "La perspectiva de un futuro mejor después de la independencia del país en 2011 fue efímera tras el estallido de una guerra civil en 2013", lamentó Unicef en un comunicado.
En las próximas horas se cumplen siete años desde que Sudán del Sur obtuvo su independencia en un referéndum, pero el conflicto en el joven país africano, ya de por sí muy pobre antes de 2011, ha hecho que los niños estén "sin escolarizar, desnutridos y vulnerables a las enfermedades, el abuso y la explotación", según la agencia de la ONU. Más de un millón de niños están desnutridos en Sudán del Sur, incluidos 300.000 en estado grave y en peligro de muerte, según los datos de Unicef.
Asimismo, el país registra la mayor proporción de niños no escolarizados del mundo, con más del 70 por ciento de los menores en edad escolar que no reciben educación, y la guerra ha afectado a uno de cada tres centros educativos, que se encuentran dañados, destruidos, ocupados o cerrados desde 2013. Unicef calcula que 19.000 niños continúan sirviendo como combatientes, cocineros, porteadores y mensajeros y sufriendo abusos sexuales, en comparación con los 500 cuando estalló el conflicto a finales de 2013 entre las fuerzas leales al presidente Salva Kiir y la oposición armada.
Cuando Sudán del Sur se independizó muchos refugiados regresaron a sus áreas de origen, pero la guerra ha obligado a más de 2,5 millones de personas, incluido más de un millón de niños, a huir de nuevo del país hacia Estados vecinos. El pasado 25 de junio, el presidente Kiir y el líder de la oposición armada, Riek Machar, cuyas fuerzas se enfrentan de forma intermitente desde finales de 2013, iniciaron una nueva ronda de conversaciones en Jartum, donde se han registrado algunos avances de cara a un acuerdo de paz que ponga fin al conflicto armado de tintes étnicos.