Moscú rechaza un encuentro entre Putin y Zelenski: ¿qué cumbres internacionales cambiaron la historia?
En las últimas décadas también se han producido otros grandes encuentros de alto nivel que, como dicen los expertos, "cambiaron el mundo"
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Los equipos negociadores de Ucrania y Turquía continúan esta semana los contactos con el fin de alcanzar un punto de encuentro común para dar luz a un posible final de la invasión rusa en territorio ucraniano.
En este sentido, en las últimas jornadas han aumentado los rumores sobre un posible encuentro entre Putin y Zelenski, un hecho que se convertiría en uno de los más importantes de las últimas décadas desde el punto de vista político, militar, diplomático y también histórico.
Por ahora, esta posibilidad ha sido rechazada de forma firme por el ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, que ha subrayado que dicho encuentro en estos momentos sería "contraproducente", y que este 'cara a cara' solo se podría producir cuando los equipos negociadores de ambas negociaciones estén cerca de acuerdos en algunos de los puntos claves del conflicto.
Estambul será el punto geográfico en el que esta semana ambas delegaciones sigan negociando, después de que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aceptase abordar en el diálogo la exigencia rusa de que se reconozca a la península de Crimea como parte de Rusia y la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk.
De celebrarse un hipotético encuentro entre Putin y Zelenski, estaríamos asistiendo a uno de los encuentros diplomáticos más importantes de la historia reciente del mundo contemporáneo. Pero, en las últimas décadas también se han producido otros grandes encuentros de alto nivel que, como dicen los expertos, "cambiaron el mundo".
Munich, 1938
En la ciudad bávara se reunieron Hitler, Mussolini, el por entonces primer ministro de Reino Unido, Neville Chamberlain, y su homólogo francés, Èdouard Daladier, con el fin de acabar con la crisis de los Sudetes. Siendo este el punto álgido de la fallida política del 'appeasement' al nazismo.
Con el fin de alcanzar la paz en Europa, se decidió la anexión de estos territorios a Alemania. Al principio fue considerada esta cumbre un auténtico éxito diplomático, pero con el tiempo se vio que los Acuerdos de Munich no frenaron los deseos expansionistas de Hitler.
Yalta, 1945
En la recta final de la Segunda Guerra Mundial. En crimea se reunieron el primer ministro de Reino Unido, Churchill, el presidente estadounidense, Roosevelt, y el líder soviético, Iosef Stalin.
Esta cita es considerada por muchos como el comienzo de la Guerra Fría, ya que entre estas tres fuerzas internacionales, sin contar con más, se determinó el mapa internacional de posguerra: con los aliados cediendo ante los intereses de la Unión Soviética para seguir unidos. Con esta medida, Stalin conservó los territorios polacos que se habían anexionado a comienzos del conflicto, a cambio de entrar en la guerra contra Japón.
Pekín, 1972
Esta cita es considerada como "la semana que cambió el mundo", así la tituló el presidente estadounidense Richard Nixon. Esta era la primera vez que un presidente viajaba desde la Casa Blanca a China, por entonces considerados grandes enemigos. Los efectos del encuentro entre Nixon y Zedong no se vieron a corto plazo, pero fue la primera piedra para recuperar las relaciones bilaterales entre Washington y Pekín, a pesar de que este último comenzó a distanciarse de Moscú.
Reikiavik, 1986
Islandia fue el punto de encuentro entre Reagan y Gorbachov. Estas conversaciones estuvieron a punto de conseguir un pacto que eliminaría las armas nucleares de ambas potencias, pero al final no se llegó al acuerdo por la negativa de Washington. Estas conversaciones tuvieron sus frutos varios meses después, cuando se firmó el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio.
Singapur, 2018
La cumbre de Singapur fue la primera vez que un presidente en funciones de los Estados Unidos, Donald Trump, se reunía con el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un. A pesar de no materializar ningún acuerdo concreto, ambos líderes señalaron que este era el comienzo de una nueva etapa y que se habían superado varios obstáculos.