El personal laboral de España en el Reino Unido mantiene su huelga indefinida

Son españoles, trabajan para los españoles y dependen del gobierno español. Pero viven en el Reino Unido. Y están desesperados. Este viernes se cumplen 40 días de huelga y ni el ministerio de Exteriores ni el ministerio de Hacienda les han ofrecido aún soluciones reales para su precaria situación laboral.

La novedad es que ahora, además, los sindicatos negocian por su cuenta con el ministro José Manuel Albares en Madrid y han llegado a anunciar un acuerdo sin haberse puesto en contacto con los protagonistas de la huelga, tal y como explican desde Londres los propios trabajadores en declaraciones a la Cadena COPE: “Desde CCOO, CSIF y UGT han sacado un comunicado conjunto que ni siquiera habían consultado con nosotros, y encima dan a entender que la huelga ha terminado, cuando no es así”.

Lo que pide el personal laboral de la Embajada española en Londres, junto al de los Consulados en el Reino Unido (Londres, Manchester y Edimburgo), es una revisión salarial que les permita mantenerse y poder seguir cubriendo las necesidades básicas. Después de 14 años con sueldos congelados, reclaman una subida que compense el 27,5% de poder adquisitivo que ha supuesto, además de otras reivindicaciones relacionadas con el desamparo legal en el que les ha dejado el Brexit.

Lo máximo que ofrece Exteriores por ahora es una horquilla del 8-10% Fuentes de la Embajada española en el Reino Unido consultadas por la Cadena COPE aseguran que el acuerdo “está muy muy cerca”, e incluso añaden que “ya podemos hablar del 9,5”, pero no se esperan noticias definitivas al menos hasta la semana que viene.

Los llamados PLEX (Personal Laboral de Exteriores) lamentan que el estrangulamiento laboral en el que se encuentran repercuta directamente en la atención a los ciudadanos: hay más de 300.000 españoles registrados oficialmente en el Reino Unido, a los cuales hay que sumar los viajeros o turistas que puedan necesitar atención legal, médica o asesoramiento en su propio idioma ante situaciones imprevistas. “El gobierno ha abandonado a nuestra gente”, denuncian.