Jornada electoral en el Reino Unido

Como ya demostrara el Brexit, la sociedad británica se ha convertido en impredecible, sumida en la desorientación y acosada por un terrorismo que está produciendo unos efectos devastadores. En los inicios de la campaña electoral, la líder conservadora Theresa May se las prometía muy felices, pero en las horas finales del proceso las tornas ha cambiado y la distancia que separa a los conservadores de los laboristas de Jeremy Corbin, que ha abandonado el centro social para radicalizarse en la izquierda, se ha reducido a la mínima expresión. Este cambio en los sondeos se ha debido, entre otros factores, a una campaña electoral trufada de errores por parte de una líder conservadora que ofrece una imagen demasiado plana y poco capaz de empatizar con los votantes. Si lo que pretendía May con la convocatoria adelantada de las elecciones era reforzar su autoridad ante las negociaciones del Brexit con la Unión Europea, la jugada se le puede volver en contra. Pase lo que pase a lo largo del día de hoy, no parece previsible que Theresa May vaya a ser capaz de consolidar su liderazgo dentro del partido Tory, con lo que continuará la incertidumbre y se agudizará la inestabilidad en una nación que necesita referentes fuertes para afrontar los retos que se ciernen sobre su futuro más inmediato.