Línea editorial 26/08/2021
Aplicar la ley, una solución olvidada
El problema de los menores llegados a Ceuta en pleno fragor de la crisis diplomática entre España y Marruecos, se ha convertido en un rompecabezas para el Gobierno
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El problema de los menores llegados a Ceuta en pleno fragor de la crisis diplomática entre España y Marruecos, se ha convertido en un rompecabezas para el Gobierno que, finalmente, ha obligado al propio Sánchez a intervenir personalmente, junto al presidente de la ciudad autónoma. La solución que ambos encontraron ayer en su encuentro en La Moncloa, después de un nuevo varapalo judicial, es algo tan simple como cumplir la ley. De esta manera, el presidente del Gobierno ha venido a desautorizar a su ministro del Interior, Grande Marlaska al reconocer explícitamente que estaba aplicando una vía de escape, a todas luces ilegal, para forzar la repatriación de esos centenares de menores no acompañados, al margen de todas las garantías recogidas por la Ley de Extranjería, del respeto a los Derechos Humanos y de la legislación internacional.
Como era de esperar, los partidos de la oposición han vuelto a pedir la dimisión de este contradictorio ministro del Interior que, pese a su formación jurídica y su experiencia como juez, se suele saltar la ley cuando no le interesa cumplirla. En todo caso, aunque se ignora todavía el número de menores que ya han sido repatriados por la "vía rápida" de Marlaska, habrá que esperar ahora a una revisión de cada uno de los expedientes de estos menores. El objetivo es averiguar quiénes están en situación de vulnerabilidad y quiénes tienen capacidad de discernimiento para preguntarles si desean volver a su país o quedarse en España. Será, por tanto un procedimiento lento y laborioso que ya debería haber sido aplicado desde primer momento en espera del acuerdo indispensable con Marruecos. Pero, al menos, se cumplirá con la ley, a pesar de las prisas de Marlaska y del presidente de Ceuta.