Línea Editorial 26/01/2017

Los obispos de Estados Unidos contra el muro

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

1 min lectura

En plena visita de los Secretarios de Estado mexicanos  de Exteriores y de Economía a Estados Unidos, las noticias acerca de las relaciones entre ambos países son más que confusas. Trump confirmó el martes que habría muro y lo pagaría México, suavizó ayer sus declaraciones respecto a su vecino para acabar confirmando hoy que México pagará, o no habrá próxima reunión con el Presidente Peña Nieto. El asunto del muro es grave. Lo han subrayado con lucidez e inteligencia los Obispos de Houston y Austin. En sendas declaraciones públicas han insistido en tres cuestiones cruciales: el miedo e inseguridad que aumentarán entre los inmigrantes, el incremento de los negocios de tráfico y trata, y las nuevas dificultades para las relaciones de vecindad a lo largo de la frontera.La Iglesia católica en Estados Unidos seguirá practicando la acogida y la compasión, con muro y sin muro, al tiempo que seguirá pidiendo una reforma migratoria sostenida sobre el sentido común. Criminalizar a los migrantes, atentar contra su unidad familiar, someterlos al pánico y amenazar con deportaciones masivas no acabará con el tráfico ilegal de personas. La trata es un negocio que recorre México y del que se nutren mafias que operan a uno y otro lado de la frontera, igual que se enriquecen del tráfico de drogas y de armas. La frontera entre México y Estados Unidos no es segura, pero hasta el día de hoy ambos Gobiernos han luchado por relaciones pacíficas. El muro de Trump es el primer conflicto internacional de la nueva Administración estadounidense.