Una sola familia, una casa común

Cáritas Internacional se ha reunido en Roma bajo la presidencia del Cardenal de Manila Luis Antonio Tagle. El tema de esta asamblea gira en torno al cuidado de la casa común según el mandato de la encíclica Laudato Si del papa Francisco. Los temas a tratar son acuciantes: desplazados forzosos, conflictos bélicos, desastres medioambientales. En definitiva, un cuadro sombrío que nos desborda, como ha reconocido el Cardenal Tagle, y al mismo tiempo nos urge a comprometernos.

Cáritas va a abordar esta tarea con el horizonte de alumbrar una estrategia de acción capaz de revisar nuestro actual modelo de desarrollo para salvaguardar tres objetivos básicos: reducir los riesgos que amenazan a la humanidad, salvar vidas y reconstruir comunidades.

Las Cáritas locales llevan decenios impulsando este modo de proceder, y en un mundo global la estrategia debe adaptarse a los desafíos de un mundo cada vez más interdependiente. En el centro del compromiso de Cáritas están siempre los más pobres y vulnerables. Ellos son los más afectados cuando se trata de guerras, contaminación de los acuíferos, plagas que afectan a los cultivos o ciclones y terremotos. 

Hacer frente a los dramas derivados de estos desastres requiere técnicos y Cáritas dispone de excelentes profesionales. Pero sobre todo se requieren hombres y mujeres verdaderamente comprometidos en nombre del Evangelio con el desarrollo de todos los seres humanos y de todos los pueblos.