Esperanzar y actuar con la creación

Con la Jornada de Oración por el Cuidado de la Creación, da comienzo hoy el Tiempo de la Creación, propuesto por el Papa Francisco, que se extenderá hasta el próximo 4 de octubre, festividad de San Francisco de Asís, patrono de la ecología. 

Con el título “Esperanzar y actuar con la creación”, esta jornada remite a la Carta de san Pablo a los romanos donde se ilumina y presenta el significado profundo de la esperanza cristiana. Los obispos españoles, en sintonía con el mensaje del Papa Francisco, nos recuerdan que la teología de la creación nos pone sobre la pista de que todo fue creado por amor y que en ese mismo amor está la plenitud de toda la creación, al tiempo de que nos sitúa como criaturas, vulnerables y necesitadas del otro.

En este contexto, la Iglesia ha de convertirse para ser testimonio de esperanza en medio del dolor y la oscuridad. A la Iglesia, y con ella a cada uno de nosotros, le corresponde caminar por las sendas de la buena noticia de una esperanza comprometida, encarnada en el drama de lo humano y lo natural.

La visión cristiana del mundo destaca la posición central del hombre dentro de la creación y su relación con el entorno natural, sin considerarse el centro absoluto del universo, a la vez que reconocemos su interdependencia con otros seres vivos y el medio ambiente del que forma parte. 

En cuanto que criaturas, reconocemos así que la creación es un don de Dios para la humanidad; un don y una tarea, que incluye el cuidado de la casa natural, que es casa común, que ha de ser cuidada manera coherente, apostando por una ecología integral que reconoce y reclama la dignidad intrínseca de cada ser humano.