Los primeros cien días de Donald Trump

Donald Trump acaba de cumplir cien días en la Casa Blanca. Bien es cierto que se le empezó a juzgar antes incluso de que resultara elegido, pero los cien días marcan una primera convención para poner la lupa con cierto fundamento a su gestión. Este fin de semana, en un acto en Pensilvania, Trump se ha jactado de haber cumplido una promesa tras otra. Pero no es cierto. Su famoso “Contrato con el votante americano” para los primeros cien días de gobierno contenía 55 promesas, de las que tan solo ha sido capaz de sacar adelante 5 y de poner en marcha una docena más, que aún no han llegado a buen puerto. Su falta de experiencia le ha jugado una mala pasada y ha visto cómo algunas de sus medidas estrella, como las migratorias, la prometida construcción de un nuevo muro en la frontera mexicana, o la reforma sanitaria que sustituyera a la de Obama, o bien ni siquiera se han presupuestado, o no han llegado a votarse en el Congreso o han terminado chocando con los Tribunales. Es una característica recurrente del populismo, terminar por darse de bruces contra la realidad. En política internacional los bandazos han sido continuos y su política ha sido errática. Es cierto que también ha tomado en estos cien días decisiones importantes en la prometida política Pro-vida, pero es insuficiente para aprobar en su conjunto los primeros pasos de un Presidente, que parece necesitar un enemigo permanente, tanto dentro como fuera del país, y que a veces parece gobernar a golpe de tuit, con todo lo que eso significa cuando es el Gobierno de Estados Unidos el que está en juego.