Rajoy se la juega contra la corrupción

La sesión de control al gobierno en el Congreso ha discurrido, una semana más, por los derroteros del único tema que parece existir en España, la corrupción. El PSOE y Podemos siguen empeñados en una estrategia de desgaste del gobierno, sembrando dudas incluso sobre la actuación personal de Rajoy, mientras Ciudadanos está esperando recoger los frutos de esta marea negra de la política. El Presidente del Gobierno opta por no seguir el juego a los socialistas, y su cierre de filas en torno a los suyos que han sido reprobados es una forma de mostrar fortaleza y de ganar tiempo, a la espera de que el temporal amaine.Rajoy ha aclarado que no va cesar al ministro Rafael Catalá, ni al Fiscal General, José Manuel Maza, ni al Fiscal anticorrupción Manuel Moix. En la sesión de control, hoy, el Presidente ha subido el tono de sus respuestas para ofrecer una forma de tranquilidad política y una imagen de saber adónde va y de no tener nada que esconder.El Presidente insiste en que el Gobierno está empeñado en prevenir, perseguir, descubrir con el apoyo de quienes son competentes, y castigar la corrupción. Rajoy se encuentra en la tesitura de convencer precisamente de eso a la sociedad española, sin descuidar el complejo ajedrez de la gobernación en minoría. Es una tarea que le compete de manera primordial.