Acuerdo sobre el Constitucional

El principio de acuerdo al que han llegado el PP y el PSOE sobre la renovación de cuatro miembros del Tribunal Constitucional es un ejemplo de la nueva voluntad de gobernar con las artes del consenso y de establecer puentes permanentes con las formaciones mayoritarias. Este importante acuerdo, a la espera de los que se puedan producir en torno a los Presupuestos Generales del Estado, responde a un deseo de unidad en materias que afectan a la arquitectura del Estado, como el Tribunal Constitucional, pieza clave garante de los principios sobre los que se asienta el orden jurídico y político. Este acuerdo entre el PP y el PSOE implica un mensaje claro de unidad frente a las amenazas secesionistas y ante los populismos que quieren hacer borrón y cuenta nueva de la Constitución de 1978.Como ha señalado el presidente del gobierno Mariano Rajoy, el diálogo y la mano tendida son lecciones aprendidas del pasado más reciente. La letra del acuerdo alcanzado para la renovación de cuatro miembros a propuesta del Senado pasa por un reparto equitativo de los candidatos, dos del PP, uno del PSOE y el tercero de consenso entre ambos partidos. Este acuerdo no debería significar la exclusión de ningún candidato por motivos de sectarismo ideológico, como sucedería en el caso de un posible veto al magistrado Andrés Ollero para que no alcance la Presidencia del alto Tribunal.