Línea editorial COPE: Los BRICS desafían el modelo de Occidente

Los BRICS, el bloque formado por Brasil, Rusia, India, China, y Sudáfrica, dan un salto cualitativo con la admisión de seis nuevos miembros: Arabia Saudí, Irán y Emiratos Árabes, Argentina, Egipto y Etiopía.

Resalta a primera vista la difícil compatibilidad de algunos socios. Y sin embargo sería un error subestimar la cumbre celebrada en Johannesburgo.

Algunas propuestas son ciencia ficción, como la divisa común que defiende Lula da Silva. Por el contrario, el nuevo Banco de Desarrollo ya rivaliza con el FMI.

No se vislumbran nuevos avances de este calibre en arquitectura institucional. Lo que sí se ha consolidado es un marco de cooperación reforzada, más bilateral que multilateral, al margen de normas o de sanciones dictadas por EE.UU. y sus aliados, como las impuestas a Rusia por la invasión de Ucrania.

Hay ya sobre la mesa un modelo de globalización alternativo, mérito atribuible a la diplomacia china. Y esto debería suscitar autocrítica en Occidente por haber descuidado la relación con América Latina o el sudeste asiático, fruto de una visión miope del mundo, en la que el sur no es más que un proveedor de materias primas y el molesto lugar de origen de personas migrantes.

El modelo occidental es objetivamente mucho más beneficioso para el planeta que el chino, pero Occidente ha actuado durante demasiado tiempo en contra de los elevados ideales universales que preconiza y eso ha erosionado su credibilidad