Ángel Gabilondo, en busca del voto de centro perdido

Una estrategia que busca “rascar” votos de Ciudadanos. El partido naranja, según varias encuestas, va a tener difícil entrar en la Asamblea de Madrid, conseguir ese mínimo del 5% de los votos. Y en caso de entrar, sería con no mucho más de 7 diputados. 19 menos de los que ha tenido estos 19 meses de legislatura.

El NO a pactar con “este Pablo Iglesias radical” es la clave de esta nueva estrategia. Alejarse de la radicalidad y buscar ese votante moderado. También en esta línea está su idea de mantener el Hospital Isabel Zendal (proyecto con el que nunca ha estado de acuerdo) y su mensaje reiterado de que, en caso de convertirse en presidente de la Comunidad de Madrid, no subirá los impuestos.

NO A PABLO IGLESIAS

En este asunto Ángel Gabilondo ha cambiado poco. El candidato socialista siempre se ha movido en la moderación, huyendo de los extremos, de las declaraciones altisonantes y de los discursos radicales. En su tono y en sus formas.

De hecho, este apenas año y medio que hemos tenido de legislatura en Madrid, Gabilondo ha sumado críticas por su oposición moderada a Ayuso. Poco contundente se ha llegado a oír incluso a miembros del propio PSOE.

Por eso su NO a pactar con Iglesias tras las elecciones del 4-M sigue esta línea de moderación.. Insiste en que sus socios de gobierno deben ser, por este orden, Más Madrid y Ciudadanos. Otra cosa es que, después del paso por las urnas, los números no cuadren y Ferraz imponga una negociación con Unidas Podemos. Pero de momento, hasta el propio Gabilondo se considera el "verso suelto" del PSOE en Madrid.

LA POSTURA ANTE EL HOSPITAL ISABEL ZENDAL

Ángel Gabilondo asegura ahora que no va a cerrar este hospital, pero para no “dilapidar” el dinero. Lo convertiría, dice, en un hospital público de verdad con una plantilla estable y con buenas condiciones laborables. Pero el candidato socialista siempre se ha opuesto a este proyecto.

Sobre todo con ese sobrecoste final de 100 millones de euros que, asegura Gabilondo, no han sido nunca justificados con ningún informe. También ha criticado reiteradamente la opacidad de las contratos públicos que han permitido levantar este centro.

Es el motivo por el que descartó la invitación de la presidenta Isabel Díaz Ayuso, para acudir al acto inaugural del hospital Isabel Zendal en Diciembre de 2020. Una manera, dijo Gabilondo tras una junta de portavoces días antes de esa inauguración, de expresar “su disconformidad” con esta infraestructura.

Tampoco fueron los otros dos partidos de la izquierda, Más Madrid y Unidas Podemos. Si estuvieron en una protesta convocadas por colectivos sanitarios a las puertas del hospital.

SUBIDAS DE IMPUESTOS, AHORA NO

En busca de esos votos de centro, de Ciudadanos, la estrategia de Ángel Gabilondo es insistir en que no se va a tocar la fiscalidad en Madrid. Matiza, eso sí, que sería estos dos años que va a durar el gobierno que salga de las elecciones del 4-M. Ese periodo necesita, según Gabilondo, un ejecutivo excepcional para hacer frente a la recuperación de la pandemia y la recuperación económica.

Pero no deja claro si, en caso de tener que asumir la entrada de Pablo Iglesias en un hipotética gobierno de izquierdas, tendría que subir esos impuestos o qué hará si tras las elecciones de 2023, el PSOE gobierna Madrid.

Lo único seguro es que en el ideario socialista siempre ha estado la idea de subir impuestos, que hay margen en Madrid. De hecho ha defendido siempre las acusaciones de “dumping” fiscal al gobierno madrileño que llegan desde el Ministerio de Hacienda.

Además, el pasado 12 de Febrero, el PSOE, junto a MÁS MADRID, registraron 18 enmiendas que suponían una subida de impuestos para los madrileños valoradas en más de 3.0000 millones de euros. Un varapalo de más de 1.060 euros para los bolsillos de cada madrileño.

¿Dónde se iban a producir esas subidas? Pues subir un escalón el tramo autonómico del IRPF, el Impuesto de Patrimonio y reducir las bonificaciones actuales del 99% en Sucesiones y Donaciones. Ponerlo como en La Rioja, Canarias o Cataluña, dependiendo del nivel de renta y del parentesco de las personas implicadas en esa donación.

Estas enmiendas también limitaban la deducción por el pago de intereses de préstamos a estudios de Grado, Máster y Doctorado, y la deducción por el pago de intereses de préstamos para la adquisición de vivienda por jóvenes menores de 30 años.