Las denuncias cruzadas y los discursos inflamados enconan la precampaña del 4-M
La Comunidad de Madrid encara las últimas cuatro semanas de una campaña electoral que está llamada a ser trascendental tanto para Madrid como para el resto de España
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Queda justo un mes para que los colegios electorales de la Comunidad de Madrid abran sus puertas en una cita electoral que está llamada a ser un punto de inflexión, tanto en la política madrileña como en la política a nivel nacional.
Desde que el pasado 11 de marzo la actual presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, disolviera la Asamblea de Madrid y convocará elecciones se han producido importantes decisiones que han tenido mucho impacto más allá de la Comunidad de Madrid, como por ejemplo la salida de Pablo Iglesias del Gobierno de coalición para presentarse como candidato de Unidas Podemos a la Presidencia de la Comunidad de Madrid.
En otro orden se encuentra Ciudadanos, que inmerso en una profunda crisis interna se presenta a estas elecciones con un nuevo candidato, Edmundo Bal, y con la esperanza de conseguir un resultado que permita a la formación naranja coger un poco de aire, tanto en Madrid como a nivel nacional, después del mal resultado cosechado el pasado mes de febrero en Cataluña y las diferentes dimisiones y fugas que se han producido en las filas de Inés Arrimadas después de que se conociera la moción de censura que Ciudadanos y PSOE presentaron en la Región de Murcia contra el Gobierno de Fernando López Miras.
El fuego cruzado, principal síntoma de la campaña electoral
Las denuncias entre partidos y las acusaciones están marcando las primeras semanas de campaña en Madrid. El PSOE-M ha registrado este viernes una denuncia ante la Junta Electoral Provincial de Madrid en la que impugna la candidatura del PP a las elecciones madrileñas 4 de mayo en la que incluyen a Toni Cantó como 'número 5' de la lista encabezada por Isabel Díaz Ayuso, cuando se empadronó fuera de tiempo para poder participar en las mismas.
También, desde el Partido Popular se ha procedido a denunciar a Unidas Podemos por poner publicidad de la campaña de Iglesias en Facebook. Según informan varios medios como 'El Mundo', "En el partido de Isabel Díaz Ayuso esgrimen que el artículo 53 de la Ley Orgánica de Régimen Electoral "prohíbe expresamente" esta práctica antes de la campaña, que en el caso de estas elecciones autonómicas se iniciará el próximo 18 de abril".
Además, a un mes vista de las elecciones, hay varios frentes políticos que están llamados a marcar el día a día de esta intensa campaña, a la que muchos han definido como un punto de inflexión que puede marcar la política a nivel nacional. Esos frentes a los que habrá que prestar atención son muy dispares: desde si Isabel Díaz Ayuso necesitará a Vox y/o Ciudadanos para formar gobierno hasta cuál será el futuro de Ciudadanos y de Pablo Iglesias si estas formaciones consiguen un mal resultado.
A priori, con todas las cartas ya encima de la mesa, el principal enfrentamiento político, al menos en los actos de campaña, será el que protagonicen Isabel Díaz Ayuso y Pablo Iglesias. La presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid ha puesto toda la atención de su campaña en frenar el discurso del ex vicepresidente del Gobierno, a través de su lema de campaña 'Comunismo o Libertad'. Por su parte, Iglesias ya ha explicado en más de una ocasión que llega a Madrid para frenar las políticas de Ayuso, pero también tendrá que mirar a su izquierda, donde la negativa de 'Más Madrid' a ir en una lista conjunta puede ser un importante problema para su convivencia en la Asamblea de Madrid.
A pesar de estos primeros compases de la campaña, las encuestas están siendo el principal instrumento para tomar el pulso a la calle. Todas coinciden en que el Partido Popular será la fuerza política más votada, a pesar de que necesitará negociar con otras fuerzas como Vox Ciudadanos para poder gobernar. En este contexto, es importante ver cómo pueden evolucionar las encuestas para saber si Ayuso se tendrá que sentar a negociar solo con Rocío Monasterio o también con Edmundo Bal.
El objetivo de Ayuso: la mayoría absoluta
La presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid y candidata del Partido Popular, Isabel Díaz Ayuso, no ha ocultado en ningún momento que su principal objetivo es conseguir la mayoría absoluta, para poder gobernar en solitario y dejar atrás viejos fantasmas del pasado, ya que ha explicado en más de una ocasión las complicaciones que ha tenido durante estos meses con Ignacio Aguado para poder llegar a importantes acuerdos.
A pesar de que en sus intervenciones se ha referido a todas las fuerzas políticas, el discurso de Ayuso está muy centrado en Pablo Iglesias, ya en el Partido Popular es considerado, a pesar de que las encuestas dicen lo contrario, el principal rival de Ayuso, debido a que a su juicio representa todos los principios de Sánchez. Isabel Díaz Ayuso ha sido una de la presidenta regionales más críticas con la gestión que desde Moncloa se ha hecho durante esta crisis y siempre ha presentado a Madrid como la mejor alternativa a las políticas de coalición que han sido marcadas por Sánchez y por ahora su rival político, Pablo Iglesias.
Vox y su futuro papel en la Asamblea de Madrid
Todas las encuestas coinciden en que Rocío Monasterio y Vox jugará un papel fundamental en el futurible gobierno de Isabel Díaz Ayuso, ya que necesitará sus apoyos para gobernar y después de los problemas con Ciudadanos se espera que el partido de Santiago Abascal sea pieza fundamental en la Asamblea de Madrid.
En las últimas horas, Rocío Monasterio ha subrayado su buena relación con Isabel Díaz Ayuso, e incluso ha coincidido con ella en reivindicar los problemas que Aguado ha provocado para el Gobierno regional, frenando importantes acuerdos, sobre todo en materia fiscal.
Por otra parte, el presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, también abrió la puerta a un posible apoyo a Isabel Díaz Ayuso para que pueda seguir gobernando: "Si Isabel Díaz Ayuso depende de nuestros votos no va a haber ningún problema, Vox va a evitar que llegue la izquierda a la Comunidad de Madrid".
El futuro de Ciudadanos se juega en Madrid
El resultado de Ciudadanos es determinante para su supervivencia como partido político. Las encuestas dejan la puerta abierta a que la formación naranja se pueda sentar en la mesa de negociaciones en caso de que el Partido Popular necesite también sus apoyos para poder gobernar.
Si este escenario se produce, será interesante observar cómo se producen los primeros acercamientos entre Ayuso y Edmundo Bal después de todo lo vivido en las últimas semanas. La llegada a Madrid de una de las principales personas de confianza de Inés Arrimadas parece haber dado un poco de oxígeno a la formación, después de la salida de Aguado y de la marcha de Toni Cantó a las filas populares.
Desde Alcalá ya han informado que no están dispuestos a pactar con "cualquier opción que suponga que los polos puedan decidir el destino de los madrileños", cerrando la puerta a sentarse a negociar con formaciones como Vox, Ciudadanos o 'Más Madrid' y haciendo un llamamiento de cohesión centrista a Partido Popular y Partido Socialista.
El PSOE centra las críticas en la foto de Colón
El PSOE parece estar ocupando una segunda línea en esta campaña electoral, e incluso ha perdido atención mediática dentro de la izquierda después de la llegada de Iglesias a la campaña madrileña. Este sábado, Gabilondo intentaba dar un golpe de efecto con la presencia de Salvador Illa en Madrid, que ha atacado de forma directa a Isabel Díaz Ayuso por su gestión durante el tiempo que fue titular del Ministerio de Sanidad.
Los socialistas quieren que Gabilondo se convierta en el Illa madrileño y consiga un resultado exitoso como el que cosechó en Cataluña, a pesar de que su presencia en el día a día de las negociaciones para formar el gobierno de la Generalitat está pasando casi desapercibida.
Gabilondo ha recurrido a la 'foto de Colón', estrategia que ya utilizó Sánchez, en la última campaña nacional para centrar sus críticas en PP, Vox y Ciudadanos. A su juicio Madrid no puede caer en manos de Ayuso y de las otras formaciones de derechas y pide una movilización del votante socialista para poder conseguir la ansiada Puerta del Sol. A pesar de sus intentos, en el Partido Socialista son conscientes de que el resultado será peor que en 2019 y previsiblemente cederán el puesto de fuerza más votada al Partido Popular.
Pablo Iglesias y su "papel necesario" en Madrid
El todavía líder de Unidas Podemos se presentó a las elecciones en Madrid porque, a su juicio, es necesario para evitar el ascenso del centro derecha. Este movimiento sorprendió de forma significativa, ya que estaba dejando la Vicepresidencia del Gobierno para optar a presidir la Comunidad de Madrid en un momento en el que las encuestas no son nada favorables.
Iglesias quiere "cambiar las cosas" y poner punto y final al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. Para ello, nada más dejar el Palacio de la Moncloa. El candidato de Unidas Podemos se ha recorrido diferentes barrios para palpar el sentimiento de un electorado que tradicionalmente ha sido de izquierdas, pero que en los últimos meses han mostrado también su descontento por el giro de guion que las políticas de Iglesias habían tomado respecto a los discursos pronunciados hace unos años. También, los primeros instantes de la campaña de Iglesias han estado marcados por importantes decisiones, como la de incluir al presidente del Sindicato de Manteros en las primeras posiciones de su lista electoral.
'Más Madrid' y el liderato de Mónica García
La formación de Íñigo Errejón mostró desde el primer momento que no cederían ante las presiones de Iglesias, negando la opción de ir en una lista conjunta. En este sentido, en las últimas horas la formación de izquierdas ha mirado hacia el centro para abrir la puerta a Ciudadanos, con el que no ha rechazado que en futuro pueda sentarse a negociar. "Nosotros creemos en la reinserción".
Con todos estos alicientes arrancan las últimas cuatro semanas de la campaña electoral la Comunidad de Madrid, donde el panorama político no será el único frente al que se deberá prestar atención. También está el epidemiológico, con todas las variantes que ello conlleva: ritmo de vacunación, restricciones, cierres perimetrales. Además, los últimos flecos de la campaña electoral y el encuentro de los madrileños con las urnas el próximo 4-M coincidirá con un momento importante para el Gobierno de Sánchez, ya que estará a las puertas de decidir si prorroga o no el estado de alarma que finaliza el próximo 9 de mayo.