La Comunidad de Madrid va a inspeccionar 500 autobuses escolares

Un día después de que se detuviera a dos conductores de rutas escolares por dar positivo en un control de drogas, la Comunidad de Madrid ha presentado sus dos campañas de inspección de autobuses escolares interurbanos: actualmente se está llevando a cabo la primera, al inicio de curso, y la segunda, será en febrero. En este septiembre se van a revisar 500 autobuses. Los inspectores de la Comunidad se aseguran de que cuentan con el permiso de circulación, el permiso de conducir, la ficha de inspección técnica o la habilitación para hacer transporte escolar. Además, también vigilan que haya una persona que acompañe a los alumnos. Por su parte, la Guardia Civil de tráfico y la Policía municipal se encarga de controlar el estado de los conductores y del interior del autobús. “Nosotros nos limitamos a revisar la documentación y la Policía lo hace con las condiciones técnicas de seguridad: la pantalla, el martillo, el cartel indicativo de transporte escolar o que los escalones sean reflectantes”, ha explicado María Teresa González, una de las inspectoras.

Estas inspecciones de la Comunidad se hacen en los centros escolares, pero los agentes pueden parar el vehículo durante el trayecto si ven signos de conducción imprudente. Estos viajes interurbanos no pueden superiores a 1 hora y deben llevar acompañante los colegios de educación especial, cuando las 3 cuartas partes de los alumnos son menores de 16 y cuando el 50 por ciento son menores de 12 años. El consejero de Transportes, Ángel Garrido, ha señalado que el porcentaje de infracciones es muy bajo: “El año pasado tuvimos más de 1000 inspecciones y apenas un 2% dio como resultado dio como resultado una sanción”.

La mayoría de irregularidades son administrativas, y se solucionan al poco tiempo.