Fin al conflicto en interbloques: el ayuntamiento cede y limpiará las zonas a partir de septiembre

En San Blas, los vecinos celebran la decisión, pero crítican que las tareas no lleguen hasta después del verano.

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Luis Manuel Rafael

Publicado el - Actualizado

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Fin al conflicto de competencias por la limpieza de los interbloques en Madrid, zonas privadas de uso público que sirven de paso a los portales por los que se accede a las viviendas. Hay más de 200 en todas la capital, en 14 distritos y, según el Ayuntamiento, ellos no tienen obligación de limpiarlas.

Tras meses de conflicto, fruto de las protestas de vecinos y opsición, el consistorio, finalmente, cede y en el nuevo contrato de limpieza municipal, incluirá también estos interbloques. En total, 52 millones de euros para los próximos 4 años. No solo se va a barrer y a retirar la basura. También se va a podar y a segar las zonas con vegetación.

Una de las zonas con mayor número de zonas interbloques es el distrito de San Blas. Aquí, por un lado, los vecinos celebran la decision. "Por fín, nos escuchan y solucionan este asunto", sostiene Agustina. El problema es que esas labores de limpieza municipal no llegarán hasta septiembre. "¿Qué hacemos mientras?", se pregunta. "Por experiencia y como las cosas de palacio, van despacio, podemos irnos hasta octubre o noviembre", critica.

Con la primavera en marcha y el verano a escasas semanas, ha crecido la vegetacion. "Las hierbas están enormes y eso genera muchos bichos: cucarachas, ratas.. las ratas campan a sus anchas", cuenta. En mucha de las zonas, las hierbas tienen mas de medio metro, aunque si parece que la suciedad se ha reducido en los últimos meses. De hecho, el consistorio retiró las papeleras y fueron los propios vecinos quienes tuvieron que instalar las suyas.

Más luego además, el asunto de la responsabilidad individual. "La gente es muy guarra. Vienen con los perros y dejan la mierda ahi", afirma.

Los vecinos no descartan posibles movilizaciones si la situacion en estos interbloques se vuele insostenible, por culpa del calor y la proliferación de insectos.