¿Qué medidas está tomando el Metro de Madrid ante la mala evolución del coronavirus?

Este lunes, conocíamos que el Metro de Madrid ampliaba a 52 estaciones más el sistema de control automático de aforo. Y es que a lo largo de las próximas semanas, esta iniciativa se va a ir extendiendo hasta ocupar toda la red de metro de la Comunidad de Madrid.

Son muchos lo que por motivos de trabajo utilizan este sistema de transporte que se inauguró en el año 1919, en la época del rey Alfonso XIII. Es por lo tanto que sus túneles y estaciones han soportado el peso de la historia de la ciudad. Si en la Guerra Civil (1936-1939) el metro permaneció abierto y ofreció servicio a los ciudadanos que querían refugiarse durante los bombardeos, con la llegada del coronavirus no iba a ser menos, y aunque muchos critican o siguen criticando el porqué de su funcionamiento, lo que por el momento puede resultar una certeza es que viajar en metro es seguro y, sobretodo, es práctico.

Ante la inminente situación de rebrotes en la Comunidad, en Cope nos preguntamos cómo se están planteando desde Metro Madrid las medidas de seguridad, ante la mala evolución de la pandemia. Para ello, hemos hablado con el responsable de que cada día, cada tren salga desde su estación y recorra de manera ininterrumpida su trayecto. Fernando Rodríguez es director de operación de Metro Madrid, y cuando le preguntábamos sobre este hecho, respondía que: ”en el caso de metro, las medidas que se han adoptado con la llegada de la nueva normalidad no han sido de distancia de seguridad sino de porcentaje de ocupación. Es decir, nos preocupamos por cómo se van a ocupar los trenes, y también los andenes. En el caso de los trenes, la pregunta que nos hicimos fue:'¿Cuanta gente puede viajar en un mismo vagón?'. En nuestro caso se habla de tres pasajeros por metro cuadrado. Anterior a la pandemia, se estimaban en cuatro. En el mes de junio comenzamos ha hacer pruebas para estimar el tráfico de personas, concretamente en la línea 11, en la parada de Méndez Álvaro nos dimos cuenta que la afluencia de personas era mayor, y que el margen de superar la ocupación era tan escaso que decidimos implementar el plan “aguas arriba”.

"AGUAS ARRIBA"

“En este caso, en las estaciones anteriores a "Méndez Álvaro" se decidió comenzar ha hacer restricciones en la entrada de la estación, con el fin de conseguir que el tren que venía con alta carga de viajeros tuviera menos viajeros. La decisión se tomó dado que observamos que la gran parte de los pasajeros entraban por la línea 11, concretamente se cargaba el tren de línea 6 en "Plaza Elíptica" con una densidad importante, y a su vez colmaba el porcentaje de ocupación en "Mendez Álvaro". Restringiendo el acceso en estaciones como “La Peseta” o “Carabanchel Alto” conseguimos laminar la entrada. Con ello conseguimos que los trenes procedentes de estaciones anteriores tuvieran menos carga, y por consiguiente se disminuía la ocupación de "Méndez Álvaro”.

Con este planteamiento, lo que se ha tenido en cuenta también son la aglomeraciones que puedan producirse en la propia boca del metro, es decir, antes del torno. Y es que con el sistema “aguas arriba” lo que se consigue es que los pasajeros que vayan a coger el metro en estaciones colindantes a las de gran afluencia entren en el subsuelo de la capital de manera controlada para así tener controlada también la afluencia en estaciones como “Nuevos Ministerios” o “Avenida de América”.

LA DIFERENCIA A LAS RESTRICCIONES AL OCIO NOCTURNO

La semana pasada, la Comunidad de Madrid optó por restringir los horarios en los locales de ocio nocturno como discotecas o pubs. Esta mediada causó cierto revuelo porque si de alguna forma se pretenden evitar aglomeraciones, uno de los sitios que más aglomeraciones se producían es en el propio metro. Al presentarle esta idea al director de operación de Metro Madrid, su respuesta fue clara: “somos un transporte masivo, y al tratarse de ello, las medidas sanitarias que nos interponen las autoridades sanitarias son las que interponen el uso obligatorio de la mascarilla. Sinceramente no veo factible comparar la acción que se pueda tener en una discoteca con la que se puede tener en el metro, la actividad es distinta, por lo tanto las medidas deben ser distintas también”.