Timanfaya Hernández, psicóloga: "Aunque casandos, la mayoría podríamos afrontar otro confinamiento"

Raquel Pérez Polo

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Ahora que cada uno sabemos que pasó en nuestras vidas en esos meses, ¿soportaríamos encerrarnos en casa de nuevo si fuera necesario? ¿Estamos preparados psicológicamante?

"Es muy diferente decir NO ME GUSTARÍA afrontar un nuevo confinamiento y lo que esto supondría con NO PODRÍA AFRONTAR un nuevo confinamiento, porque la mayoría podríamos, aunque indudablemente somos conocedores de que esto tendría efectos en nuestra salud" responde a cope.es Timanfaya Hernández, psicóloga sanitaria, experta en Psicología Forense y vicesecretaria de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid.

Lo que es muy patente (después de un año de pandemia, de distintos tipos de confinamientos, de mascarillas, de no tener la libertad que disfrutábamos hasta el 13 de marzo de 2020), tanto en nuestros hogares como en el trabajo, por las calles, es que "la población está cansada y eso es innegable", recalca la psicóloga.

El shock, "el choque provocado por las restricciones ha mermado las capacidades cognitivas y ha erosionado el civismo" concluye, entre otras consecuencias, un estudio liderado por el grupo de investigación Open Evidence de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), en colaboración con algunas universidades internacionales y con la empresa BDI Schlesinger Group Market Research.

La tristeza unida a la angustia nos han embargado a 1 de cada 3 españoles durante este último año. Aunque desde que está en marcha el proceso de vacunación el número se reduce, el miedo a morir, ha sido uno de los peores sentimientos y temores de la pandemia.

Cansados, vulnerables, pero también más fuertes

"La población está cansada, está más fatigada mentalmente, es innegable. Muchas personas comienzan a acusar una de las preocupaciones mayores que vemos en la sintomatología en salud mental" afirma Timanfaya Hernández que viene a corroborar los resultados de la encuesta sobre salud mental de los españoles por la covid 19 realizada por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) como que la pandemia de coronavirus ha provocado tristeza y angustia a uno de cada tres de los encuestados que reconoce haber llorado a causa de la situación que genera el tener que convivir con la amenaza de la covid. La pérdida o contagio de un ser querido, el temor a infectar a alguien o a morir, la propagación del virus o la imposibilidad de ver a amigos y familiares, son algunas de las principales preocupaciones que acongojan a la población.

El 58,4 por ciento de los 3.058 encuestados por el CIS reconoce que durante la pandemia ha sentido "mucho o bastante miedo" a morir por coronavirus, porcentaje que se eleva hasta el 68,6 por ciento ante la posibilidad de muerte de un familiar o ser querido. La franja de edad que más se identifica con este temor se sitúa entre los 55 y 64 años.

Otras causas que nos han ocasionado "mucho o bastante miedo": para un 75,3 % que el virus se propague sin fin; para un 65 %, la imposibilidad de ver a familiares y amigos íntimos; la pérdida del trabajo propio o de un familiar ha sido la peor pesadilla para la mitad de los que han participado en la encuesta; y para un 50 % que la sociedad no vuelva a ser la misma de antes y que las pandemias se conviertan en parte de nuestras vidas les han provocado mucho temor.

El estudio Scientific Reports de Nature liderado por la Universidad Oberta de Cataluña ahonda, además, en los efectos negativos invisibles que sobre la salud mental de la población ha tenido el confinamiento y las restricciones. Según este estudio "las personas que estaban más expuestas a las consecuencias de los efectos del confinamiento vieron más disminuida su capacidad cognitiva, tomaron decisiones más arriesgadas y vieron erosionado su civismo.

Como señala el profesor Francisco Lupiáñez que ha sido uno de los investigadores que han participado en el estudio, "la gente tenía mermadas sus capacidades para tomar decisiones, y reaccionaba de maneras no predecibles. En lugar de tener más cuidado por la pandemia, se arriesgaban porque no podían más. Querían, por ejemplo, que se castigara a aquellos que no llevaban mascarilla o que se saltaban las restricciones, a pesar de que ellos mismos eran más proclives a tomar decisiones que implicaban un mayor riesgo".

Y pese a los miedos a sufrir las peores consecuencias de la pandemia, desde el primer momento nos hemos repetido un día tras otro que "de esto vamos a salir más fuertes" por ello le hemos preguntado a la psicóloga: ¿lo estamos consiguiendo o nos hemos dado cuenta de que somos muy vulnerables?

"Hemos salido más fuertes y con más consciencia de nuestra vulnerabilidad, ambas cuestiones no son incompatibles. Por una parte, hemos sido conscientes de todo a lo que nos podemos enfrentar, hemos tenido que afrontar situaciones terribles, muchas personas han vivido situaciones de verdadero dolor en sus vidas, pero también, en general, somos más conscientes de la vulnerabilidad, lo que nos debe hacer también ser más conscientes de la importancia de la vida en sí misma" responde la vicesecretaria de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid.