El coronavirus, pesadilla y oportunidad para la comunidad china en el mundo

La joven estudiante china Chingching Pen cuenta en COPE el impacto del coronavirus en su entorno en España y en China 

Carmen Labayen

Publicado el - Actualizado

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Hace 13 años que Pingping Chen vive en España. Es una de las pocas estudiantes chinas de Biología en la Complutense, la única que esta semana fue a escuchar a una de las mayores expertas en coronavirus en España Isabel Sola del Centro Nacional de Biotecnología a la factultad donde estudia el segundo curso de grado.

A su 20 años, no dudó en intervenir para trasladar al resto de estudiantes lo que ha supuesto esta crisis para su comunidad y los esfuerzos que han hecho en su país y fuera para trata de contener la epidemia y el coste que esto está teniendo. Y lo hizo con sentido crítico sobre algunas de las medidas adoptadas en China o concretamente en Wuhan, epicentro del coronavirus.

Pingping monitoriza a diario la situación en su móvil con fuentes solventes y lo que ve es que los casos fuera de China representan solo el 1 por ciento.

Pese a ello en el extranjero hay prevención contra la comunidad china, tanta que en el último mes y según cuenta a COPE en el bazar que regentan su familia el negocio ha caído sensiblemente.

“Entra menos gente, entran los que ya conocemos, que saben que no hemos vuelto a China y que no hay riesgo, pero hay menos clientes nuevos”, subraya Pingping.

No es lo peor de lo que les ha sucedido y es que en las últimas semanas han recibido insultos. A su hermano de 12 años en el colegio le han llamado coronavirus, algo realmente “insoportable” subraya.

Ping Ping se ha librado de estas actitudes liberadas en mayor medida nos cuenta en otros países que en España por proceder del país epicentro del coronavirus. Y es que según explica sus compañeros en Biológicas tienen el conocimiento suficiente para saber que no tienen nada que temer.

También en China parte de su familia se ha visto aislada para evitar contagios y llevan semanas sin poder trabajar. Otros como su tía han logrado salir y han llegado a España donde se han puesto inmediatamente en cuarentena.

“Está en aislamiento todavía de forma voluntaria y durante 14 días en una casa que le ha dejado su amiga para que esté sola y no entre en contacto con nadie” explica esta joven china que se expresa con meridiana claridad en castellano.

Le han facilitado comida y todo lo necesario para sobrevivir y también para no aburrirse. Pero como medida de precaución Pingping no ha acudido a verla. Lo hará cuando complete su cuarentena para evitar cualquier riesgo.

En general Ping Ping, ella está tranquila. Como científica en ciernes comparte lo que asegura la prestigiosa Isabel Sola y es que las cifras del nuevo coronavirus se están estabilizando. Esa es la foto a día de hoy, el futuro debido a las propias características de los coronavirus es una icógnita, también para ellas.