¿Cuánto puede llegar a costar un vestido de la alfombra roja de los Oscars?
Lady Gaga bate récord en el gran escaparate de la moda
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
Lady Gaga ha sido noticia en los Oscar por su electrizante actuación; por su química cantando junto al actor Bradley Cooper “Shallow”; por recoger una estatuilla como cerebro de esa canción y de la banda sonora de “Ha nacido una estrella” que ambos protagonizan y también por lucir el collar más caro de la historia de los premios cinematográficos más importantes del mundo que son también el mayor escaparate anual para la moda.
Es una joya valorada en cerca de 30 millones de euros y que incluye el diamante Hope de Tiffany's que llevó la mismisima Audrey Hepburn durante las fotos de promoción de "Desayuno con diamantes". Una joya de más de 128 quilates, con más de 80 facetas radiantes y 141 años de antigüedad y que incluye uno de los diamantes amarillos más grandes del mundo. Todo con unos pendientes a juego valorados en más de 10 millones de euros y un sobrio vestido de Alexander MacQueen y unos guantes negros también homenaje a la actriz más elegante de la historia.
Cuando lo esencial del atuendo de una actriz son las joyas como ocurrió en la última gran noche de Hollywood, el vestido ocupa un lugar más secundario pero generalmente y según explica a COPE Nines del Alamo al frente de la agencia de actores Maydel Manager normalmente lo primero que elige el actor o la actriz es el vestido y a continuación las joyas o los complementos.
De lo que visten los actores más cotizados del mundo, y de cada vez más actores también en España, se encargan estilistas que adquieren cotas de popularidad que a veces superan a los de sus propios empleadores.
Ellos están en contacto con los diseñadores y las marcas con las que muchos actores tienen contratos para exhibir en actos de promoción, alfombras rojas y redes sociales los modelos de una determinada firma que pueden alcanzar altas cifras debido al retorno económico que supone enseñar tu colección en una pasarela mundial como los Oscar.
En España hay pocos actores que firmen esos contratos con la firma según Del Alamo “se cuentan con los dedos de una mano” los contratos con marcas que superen los 100.000 euros. Pero en Hollywood es otro cantar.
“Yo me imagino muchos ceros porque la repercusión que tienen va más lejos que la de la Fashion Week y es toda una batalla una especie de juego de tronos por ver quién va mejor y peor vestido” explica a COPE Pepe Reyes dueño de la agencia de servicios de estilismo e imagen Lookart y el encargado de hacer los diseños de la serie televisiva “Isabel”.
Los vestidos, esmoquins, y también las joyas se eligen por catálogo explica Del Alamo “nos presentan por mail las colecciones, lo vemos y después vamos al showroom para probarlos y decidir. En actrices suelen ser más diseños nacionales y en actores tanto de diseñadores españoles como internacionales”. Y “las joyas igual se prestan y se devuelven, te envían propuestas, te dicen las que tienen disponibles y después ya es un complemento que se elige en función del vestido al igual que el resto de los complementos” señala.
Y es que salvo contadas excepciones los diseñadores no regalan los trajes a los actores y actrices que los van a exhibir en la alfombra roja. Hablamos de lo que se conoce como préstamos de colección y según señala Del Alamo “se hace un diseño exclusivo por colección, un modelo único que luego, en ocasiones, lucen otros actores y actrices”.
Al contactar con los showroom, los estilistas o representantes de actores suelen preguntar si el diseño ya ha sido utilizado antes ya que muchos actores prefieren ser los primeros. Algo posible para los muy cotizados y algo menos para los que se abren camino en el mundo del cine.
Y en lo que según Reyes “si a una marca le gusta la actriz o actor que va a llevar el vestido lo facilitan todo, el tamaño, el color y hasta hacer un diseño exclusivo”. Todo porque como explica Del Alamo con ello obtienen un retorno difícil de calcular y exponencial en likes por decirlo con lenguaje de redes sociales. En Tiffany's & Co por ejemplo no dudan de que Lady Gaga fue una buena elección para lucir su joya de la corona.